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ZENYAZEN, DE LOS ÚLTIMOS

Superiberia

Por: Andrés Timoteo  /  columnista

ZENYAZEN, DE LOS ÚLTIMOS

Aun cuando la decisión ya estaría tomada, el nombramiento del profesor Zenyazen Escobar García como titular de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) sería de los últimos que ventile públicamente el próximo gobernante estatal. Es más, su designación podría hacerse hasta el primero de diciembre tras la toma de posesión de Cuitláhuac García Jiménez.

Eso demuestra el poco espacio de decisión que tiene el mismo García Jiménez para acomodar a su gente ¡¡en su propio gabinete!! Además, al retrasar las designaciones, somete a los seleccionados a un desgaste mediático porque en los dos meses y medio que restan para su arribo a palacio de Gobierno, el maestro cordobés seguirá bajo vapuleo de otros aspirantes a la dependencia.

El mandatario electo está sometido a la voluntad de terceros, principalmente de la senadora zacatecana Rocío Nahle y de su futuro secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos – entiéndase: el transmisor de las decisiones del tabasqueño Andrés Manuel López Obrador-, y, vaya, hasta del hidalguense Ricardo Ahued, quien también es senador por Veracruz. Ellos son los que toman decisiones que le competen a él.

En las predicciones políticas todos coinciden que los mandatarios de facto serán Nahle y Cisneros, el duelo de los improvisados -trío si le dan oportunidad al mismo García Jiménez- y la apuesta es ver cuál de ellos comete más pifias. En fin, es lo que se tiene y lo que se avizora para los seis años que vendrán. Pero regresando al tema de la SEV, el todavía diputado local, Zenyazen Escobar está bajo metralla mediática para ‘tumbarlo’ del nombramiento y así seguirá.

Hace unos días, un maestro de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) salió a la prensa a desconocerlo y señalarlo de haber traicionado el movimiento magisterial para alcanzar cargos políticos, en un intento de descalificarlo ante López Obrador que hizo un pacto con la CNTE para entregarle espacios en las entidades. Es parte de la andanada para desacreditarlo mediáticamente y ante el magisterio democrático.

A la vez, el inefable Eduardo Carreón Muñoz, exdirigente estatal del Partido Nueva Alianza (Panal) está en una especie de campaña estatal para tratar de colarse a esa designación. Amparado con el supuesto madrinazgo de Elba Esther Gordillo, el también exrector de la Universidad Politécnica de Huatusco realiza eventos casi a diario y paga gacetillas en la prensa para promocionarse.

Esos eventos los hace bajo el nombre de una organización hechiza, “Educación por la Paz”, y hasta él mismo se autodenomina “embajador de la paz” -risas-. Es el último de tantos escapularios que este señor se ha colgado, basta leer el currículo que pregona y en el cual se autodefine como: actor, escritor, activista, ‘influencer’, analista, catedrático y ¡hasta profeta!

De esta forma, el “embajador de la paz” y “profeta de las naciones” quiere ser secretario de Educación, aprovechando de que, con Cuitláhuac García lo imposible es posible y nadie debe quedar sorprendido si en un capricho del destino se convierta en el encargado de la política educacional del cuitlahuismo. Con eso tomará cuerpo político lo que el escritor colombiano Gabriel García Márquez llamaba el ‘realismo mágico’.

Otro nombramiento que estaría ya asegurado en el próximo gabinete -si es que Nahle o Cisneros no le enmiendan la plana a gobernante electo- es el de Iván Luna Landa como titular de la Coordinación de Comunicación Social, quien al parecer logró imponerse sobre las pretensiones de una familia del Sur del estado que es propietaria de dos periódicos -uno de ellos en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río- que exige la vocería estatal del cuitlahuismo como coto privado.

Por eso, desde hace semanas a Luna Landa también ya lo traen bajo golpeteo mediático desde el citado consorcio periodístico que ha lanzado una campaña para exhibirlo como ineficaz. Vaya, hasta se burlan de las faltas ortográficas en los boletines que redacta para García Jiménez. También ha trascendido esos mismos empresarios le pidieron al gobernador electo la dirección de Radio Televisión de Veracruz (RTV) para uno de sus integrantes, el que dirige el periódico porteño.

No obstante, en los entretelones del morenismo se ha mencionado a la conductora de Televisa Veracruz y exreina del Carnaval, Carolina Ocampo como la futura titular de RTV -claro, si Nahle la deja, pues la zacatecana es la que aboga por la familia propietaria de los periódicos que tiene como objetivo acaparar la política mediática del próximo gobierno-.

Por lo pronto, en el caso de la Secretaría de Educación se sabe que la encargada de la Oficialía Mayor será una mujer, aunque el nombre lo tienen bajo siete llaves, no sea que Cisneros y Nahle se la tumben a Cuitláhuac García. No hay que olvidar que esa oficina es la que maneja los recursos financieros de la secretaría y el presupuesto de ésta es de los más elevados en el organigrama estatal.

SIN MOLESTAR A LOS VICTIMARIOS

¿Qué se le puede ofrecer a un doliente por su familiar asesinado o a un desesperado que no encuentra a su ser querido? Es la pregunta que han hecho todos los regímenes gubernamentales que activaron la justicia transicional o restauradora tras salir de etapas de violencia de Estado. Lo mejor que se les puede allegar es, primero, la verdad y, enseguida, la justicia.

En México, según promete el Gobierno que iniciará funciones en diciembre próximo, se tomará la ruta de la justicia reparadora, la transicional porque es un camino para que del autoritarismo se transite a la democracia, como su nombre lo indica. No obstante, aun cuando es encomiable tal decisión del próximo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador la misma genera suspicacias sobre todo por su intensión de perdonar a los genocidas.

Así se confirmó en el segundo foro de los “Diálogos por la paz, la verdad y la justicia” que se realizado el viernes pasado en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco de la Ciudad de México donde el propio López Obrador tuvo que enfrentar los gritos de protesta de los allí reunidos, víctimas todos de la “ola” de violencia que desde hace 12 años castiga al País. La mayoría exigió no dar impunidad a los verdugos de sus familiares.

Hubo reclamos generales y algunos muy precisos -como el del padre de familia que acusó directamente al gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, a su procurador de Justicia y a sus policías de amenazarlo de muerte por seguir buscando a su hija desparecida-. El grito de nueva cuenta fue “¡Ni perdón ni olvido!, y aún más, hubo quienes espetaron que los foros eran “puro atole con el dedo”.

Los activistas que buscan a sus desaparecidos o reclaman justicia por sus asesinados no son incautos y la suspicacia que les caracteriza proviene de tantos engaños recibidos de las autoridades a lo largo de estos años. Muchos de ellos perciben que hay simulación en el discurso del tabasqueño y sus funcionarios pese a que el mismo López Obrador les volvió a pedir “confianza porque no los va a traicionar”

“No vamos a tapar ningún caso, no habrá impunidad. No voy a ser tapadera de nadie, si un funcionario, cercano, un amigo, un compañero, es más un familiar, comete un delito va a ser castigado. Se termina ya la impunidad”, les dijo además de asegurarles que tendrá reuniones permanentes con las víctimas de la violencia o sus familiares, que la Secretaría de Gobernación tendrá “puertas abiertas” para atenderlos y que se atenderán las causas que originan la delincuencia.

Es más, también se comprometió que una vez que tenga la banda presidencial puesta, pedirá perdón públicamente, a nombre del gobierno de México, a todas las víctimas de la violencia. Lo cuestionable es que López Obrador habló en futuro para a un caso que exige también hablar en pasado. Se refirió a las víctimas, sí, y aseguró que comprende su dolor – especialmente a los que son padres que les arrebataron a sus hijos-, pero no habló de los victimarios. Culpó, por ejemplo, al modelo económico neoliberal como la causa de la inseguridad pública y la violencia.

También señaló que fueron el descuido a campo, a la economía primaria y a los jóvenes otros motivos para que la “ola” de delictiva esté en auge, pero no dijo nada de la “narcopolítica”, de los sus antecesores que prohijaron el narcotráfico, de las policías coludidas, de los militares violadores de derechos humanos, de los gobernadores cómplices de los carteles de la droga, de los jueces y ministerios públicos infiltrados por la mafia, de los legisladores y alcaldes que operan para las células criminales. Ni por equivocación mencionó eso.

Y de colofón, al cerrar su discurso, hincó el objetivo de éste y todos los foros: contar con un asidero para decretar un “perdón político” a los delincuentes como prometió en campaña. A pesar del grito que se escuchaba en el recinto de ¡Ni perdón ni olvido!, López Obrador les enmendó la plana: “Yo entiendo su dolor, pero yo sí perdono, en esto puedo diferir con algunos: olvido no, perdón sí”.

Así, lo del pasado viernes fue un foro de víctimas, pero no de victimarios. En el mismo se prometió justicia “en lo humanamente posible” -según lo dijo el tabasqueño-, pero se evitó hablar de justicia penal, uno de los elementos que hacen posible la justicia transicional. Se anticipó el futuro, pero se evadió hablar del pasado que es donde están los muertos y los desaparecidos.

SÍNODO CONTRA LA PEDOFILIA

Donde también hay una especie de justicia reparadora es en la Iglesia Católica que enfrenta a los demonios internos desatados.

El Papa Francisco, obligado por las circunstancias, tomó una decisión histórica: convocar a una reunión de emergencia de los titulares de las conferencias episcopales de todos los países para tratar el tema de los abusos sexuales cometidos por clérigos contra niños y jóvenes.

Será una especie de sínodo contra la pedofilia para tratar de calmar la tempestad y evitar que siga haciendo agua la “barca imperfecta”, como llamó Nostradamus a la Iglesia Católica.

En Roma se reunirán todos los presidentes de esas organizaciones -en cada País hay una conferencia episcopal que regula a los obispos y arzobispos, y la de México está presidida por el cardenal de Guadalajara, Francisco Robles Ortega-

Los escándalos ventilados de pederastia cometida por Sacerdotes, Obispos y Cardenales en todo el mundo -aunque ha causado especial escozor en los últimos años los casos de Estados Unidos, Irlanda y Chile- han provocado una crisis en el papado y en la Iglesia en general, por lo que esa reunión forzosamente deberá tomar medidas severas e históricas.

Algunos especulan que se ordenará a las conferencias entregar a los religiosos abusadores a la justicia seglar -la civil- y que habrá destituciones y despojo del ministerio sacerdotal por docenas, tal vez centenas. ¿Será tal el prodigio para expulsar al diablo que se viste con sotana? Ya se verá.

Por lo pronto, el ícono del sacerdote católico pedófilo lo tiene México, nadie le ha podido arrebatar ese título al padre Marcial Maciel de los Legionarios de Cristo.

CANAL OFICIAL

Video muestra el momento exacto del ataque en Garibaldi.

Crean grupos de vigilancia