Por: Andrés Timoteo / columnista
En ocho días, los veracruzanos podrán cambiar el futuro en sus municipios. En una semana más, podrán mandar al basurero de la historia a los partidos políticos que los han defraudado, robado, engañado y vendido con las organizaciones criminales. El domingo 4 de junio, todos los que se sientan agraviados tendrán la oportunidad de convertir el voto en un arma contra los pillos, cerrándoles el paso a sus herederos.
Hoy lunes inicia la última semana de campañas electorales –más bien los últimos cuatro días pues el proselitismo finaliza al jueves 1 de junio- y concluirá el papel de los aspirantes a un cargo de elección popular para dar paso a la decisión de los ciudadanos-electores. Es importante que éstos reflexionen minuciosamente el voto que van a emitir pues podría elevar a un buen gobernante o a un pillo.
No se debe repetir el error de llevar al poder a ladrones y holgazanes como muchos de los que actualmente despachan en los Ayuntamientos. En varias ocasiones se ha citado en este espacio el fragmento del poema escrito por el obispo y novelista brasileño Pedro Casaldáliga sobre el deber de sufragar y otra vez se vuelve a citar –y se hará cuantas veces sea necesario para despertar la terca memoria-: “Votar para botar/ para echar fuera. / Si no es para cambiar, / votar no vale la pena”.
Claro, acotando lo dicho por Don Pedro Casaldáliga, hay que subrayar que el poema ni recomienda ni llama al abstencionismo sino a provocar el cambio, a echar fuera a los corruptos. Será un error fatal de los veracruzanos caer en la trampa que ya está lanzando el mismo sistema por medio de supuestos activistas e intelectuales orgánicos: votar en blanco, anular la papeleta o sufragar por seudo-candidatos distractores, es decir anotar el nombre de un candidato no registrado en la boleta. Por ahí ya volvió a las andadas el famoso “Candigato”, que no es algo inofensivo sino una manera de robarles el voto a los incautos.
En Veracruz los ciudadanos que acudan a las urnas elegirán en total a mil 54 representantes populares porque además de los 212 presidentes municipales serán electos 212 síndicos y 630 regidores. Y en esas paradojas de la política, hoy por vez primera en la historia de la entidad los puestos más disputados son las regidurías, especialmente las dos primeras de cada planilla. ¿Por qué? Los que sean candidatos a esos cargos tienen una mayor posibilidad de convertirse en ediles.
Lo anterior sobre todo en el caso de partidos que no son punteros en la elección, como los del Partido Revolucionario Institucional (PRI) -es un hecho que los priistas recibirán masivamente el voto de castigo-. Por eso en estos comicios los priistas que sean candidatos a regidores y vayan al inicio de la lista serán los verdaderos ‘ganones’ más que los nominados a presidir la Alcaldía o la sindicatura. Y por eso también se hizo un negociazo con la venta de esas candidaturas.
En municipios medianos los líderes del tricolor vendieron las nominaciones a regidor hasta en 2 millones de pesos y en Xalapa se rompió record pues en los merenderos políticos se dice que al alcalde Américo Zúñiga le pidieron 50 millones de pesos para colocar a su secretario particular, Rodrigo Montoya, en la regiduría primera. El edil no los quiso pagar y borraron a su protegido de la planilla del priista Alejandro Montano.
LA ‘HUEVERA’ Y “HUAVUSCO”
Siguen los ecos del “huevazo” que le propinaron el jueves pasado al líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador en Huatusco –al que los tuiteros ya renombraron “Huevusco”- y ahora los llamados “peje-zombis”, es decir los militantes de Morena que resuelven el mundo desde las redes sociales y que además son buenos para la camorra, ya lanzaron una convocatoria para buscar a la mujer que “hueveó” al Peje y también lanzarle blanquillos por la cabeza.
¡Alerta máxima!, pues un huevo lanzado es un proyectil y el que no consiga huevos bien puede lanzar un tomate o una piedra, y la cosa puede terminar en un linchamiento. En días pasados en un periódico editado en el puerto de Veracruz se hizo la comparación –chusca, pero tremendamente cierta- de que los seguidores de López Obrador en Veracruz pueden repetir el caso del ruso-nazi de Cancún, Aleksei Makeev, quien fue linchado por la turbamulta luego de que en las redes sociales se lanzó la convocatoria para ir a buscarlo a su domicilio.
Hay que recordar que el ciudadano ruso, Makeev, subía a sus redes sociales videos en los que insultaba a los mexicanos en aquella ciudad caribeña lo que despertó el enojo popular y un portal digital ubicó su domicilio y publicó un llamado para que todos fueran por el youtuber racista, quien no fue asesinado pero si golpeado salvajemente al grado de provocarle daño cerebral. Ese es el peligro para la mujer que le lanzó huevos al tabasqueño –por eso en este espacio no se escribirá su nombre para no alentar a los fanáticos de Morena-, que los “peje-zombis” vayan a ajusticiarla.
Por otro lado, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares anunció que va a denunciar a la diputada federal, Rocío Nahle, quien difundió en su cuenta de Tuiter una fotografía alterada de la mujer “huevera” posando junto con un hombre de sombrero, pero que con ayuda de los programas digitales le cambiaron el rostro por el del mandatario estatal.Es decir, la legisladora alteró la imagen para tratar de ligar a la agresora de López Obrador con Yunes Linares.
Pareciera algo descabellado pero tiene una lógica: la diputada de Morena está desesperada para sacudirse el escándalo que la involucra como la principal recaudadora de dinero para López Obrador, según el último video que fue difundido y en el cual, la diputada local, Eva Cadena la menciona directamente a ella como la persona “que le acerca los dineros” al tabasqueño.
Fuentes al interior de Morena cuentan que se inició un conflicto entre López Obrador y Nahle García. Hay una especie de ruptura entre ambos, aún cuando públicamente el tabasqueño salió en su defensa. Claro, no podría hacer otra cosa en lo inmediato sino tratar de minimizar el desprestigio pues Nahle es la coordinadora de la primera bancada de Morena en San Lázaro y un prospecto electoral para el 2018.
No obstante, los bien enterados cuentan que la orden de López Obrador fue tajante: limpia tu nombre o te haces a un lado. Desde que se puso en línea el cuarto video de Eva Cadena, Nahle comenzó a ser radioactiva para López Obrador quien presume que su plumaje no se enloda pese a los pantanos en los que se mueve. Y así necesita mantenerse, sin aquellos que son vehículos para macularlo.
La diputada Federal de origen zacatecano, pero avecindada en el sur de Veracruz desde hace varios años, experta en el ramo petrolero, investigadora puntual y buena tribuna, al parecer está por caer del primer círculo pejista y pasar a la fila de los personajes incómodos junto a René Bejarano, Gustavo Ponce, Luis Costa Bonino, y claro Eva Cadena, que fueron evidenciados en videograbaciones con dinero y acuerdos subrepticios.
De ahí que la diputada Rocío Nahle está histérica, debe limpiar su nombre y para ello acusa a todos de todo. ¿Cuánta ha de ser su desesperación que el viernes pasado en una entrevista radiofónica se atrevió a decir que la mujer que entrega dinero a Eva Cadena hasta pudo ser “la esposa del gobernador (Yunes Linares)? No sabe a quién culpar para alejarse el escrutinio contra ella. En la víspera, había acusado a una hermana del fiscal, Jorge Winckler de ser la sobornadora y hace unas semanas a su homólogo, Erick Lagos Hernández de haber preparado el tinglado.
El 25 de abril, la zacatecana no sólo responsabilizó a Lagos Hernández sino que hasta pidió que “investigue la KGB, la CIA y los que quieran”. El fin de semana reculó en la acusación directa a la hermana del fiscal y aseguró que si no es ella “sería la primera en ofrecerle disculpas”. Ahora incurre en otra pifia con la fotografía alterada para ligar a Yunes con la “huevera” de Huatusco. Eso no indica otra cosa que la diputada está histérica.
