Agencias
Islandia.- Un nuevo episodio volcánico ha generado preocupación en Islandia, ya que un volcán en el suroeste del país entró en erupción el jueves por la mañana, lanzando lava al cielo a lo largo de una fisura de tres kilómetros. Esta erupción sigue a un evento similar menos de dos meses después, que llevó a la evacuación de la localidad costera de Grindavik. Aunque la lava fluye hacia el oeste y no representa una amenaza directa para Grindavik ni para una central eléctrica cercana, la situación ha generado cierta inquietud en la región.
La Laguna Azul, un popular balneario termal cercano, tuvo que cerrar sus puertas al inicio de la erupción, y sus visitantes fueron evacuados a hoteles cercanos. Esta es la tercera erupción en el sistema volcánico de la península de Reykjanes desde diciembre, una zona que alberga el principal aeropuerto del país, Keflavik. Aunque las autoridades han mantenido la calma y aseguran que la actividad aérea no se ha visto afectada, el episodio resalta la continua actividad volcánica en la región.
Islandia, situada en una zona de gran actividad volcánica en el Atlántico Norte, experimenta erupciones cada cuatro o cinco años. Sin embargo, la última erupción significativa ocurrió en 2010 con el volcán Eyjafjallajokull, que provocó el cierre generalizado del espacio aéreo en Europa debido a las enormes nubes de ceniza que lanzó a la atmósfera. La evacuación reciente de Grindavik y el episodio actual resaltan los desafíos continuos que enfrenta la población islandesa debido a la actividad volcánica en la región.
