Fortín.- Tres personas con golpes y daños materiales por más de $20 mil dejó la volcadura de un automóvil la tarde de ayer, en el bulevar Córdoba-Fortín, a la altura de la entrada de la “Posada Loma”.
Corporaciones de emergencia se trasladaron al lugar, donde paramédicos atendieron a los afectados, pero no fue necesario su traslado a un hospital. Los hechos se suscitaron alrededor de las 14:30 horas de ayer, cuando de Fortín hacia Córdoba, se dirigía un automóvil marca Ford-Fiesta, color champagne, con placas de circulación YEH-4899, el cual era manejado por el joven Omar Alfonso Mar Villafuerte, de 16 años y con domicilio en Córdoba.
Viajaba en compañía de su tía Isabel Villafuerte Martínez, así como de su amigo Carlo Eliseo Mendoza Sánchez, de 16 años y con domicilio en la calle 18, entre avenidas 21 y 23, número 2108, del fraccionamiento Lomas. Los menores ocupaban los asientos delanteros, mientras la mujer iba en la parte trasera. Momentos antes habían salido de una gasolinería que se ubica en la entrada de Fortín, y se dirigían a Córdoba, pero en una subida que se ubica entre la zona de tianguis y el fraccionamiento Lomas de la Llave, el vehículo se apagó, por lo que se fue de reversa y el joven perdió el control, saliéndose del camino y cayendo a un desnivel, por lo que quedó volcado, con las llantas hacia arriba, justo a la entrada de la “Posada Loma”.
Aún cuando los ocupantes del vehículo llevaban puesto el cinturón de seguridad, resultaron con golpes en distintas partes del cuerpo.
Por fortuna, tanto la mujer como su sobrino y el amigo de éste lograron salir del coche por sus propios medios y permanecieron en una banqueta.
Mientras tanto, testigos alertaron a las corporaciones de emergencia, a través del servicio 066, trasladándose al sitio agentes de la delegación número 39 de Tránsito del Estado con base en Fortín, quienes abanderaron el área, así como paramédicos de la Cruz Roja, que le brindaron los primeros auxilios a los afectados, ya que resultaron con golpes en la cabeza, el tórax y los brazos, pero por fortuna no fue necesario su traslado al hospital.
El joven que manejaba el automóvil explicó que “apenas habíamos salido de la gasolinería, porque le faltaba anticongelante al coche, ya que se andaba apagando, y cuando íbamos por la subida, se me volvió a apagar y se me vino para atrás, hasta que se salió del camino y se cayó”.
Los agentes viales tomaron conocimiento del accidente, y ordenaron el traslado de la unidad a un corralón, para el deslinde de responsabilidades.
Antonio Osorio
EL BUEN TONO