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Huatusco.- Cientos de personas abarrotaron el cementerio municipal; desde muy temprana hora varias familias se dirigían con flores a visitar a sus madres sepultadas en el panteón local.
El colorido inundó las tumbas, después del Día de Muertos, el 10 de Mayo es cuando más personas acuden al camposanto.
La visita era recordada con una melodía de mariachi o con un solitario cantante norteño que rasgueaba con melancolía la guitarra y entonaba una y otra vez la inmortal melodíaTres coronas a mi madre, de los Cadetes de Linares.
En los pasillos, se desarrollaba el vaivén de los deudos carentes del pilar esencial en la vida, la madre. Cada quien a su estilo recordaba a su mamá, algunos con solemnidad otros con devoción y otros más con alegría. El 10 de Mayo cobra un sentido especial en las tumbas de los cementerios, ya no hay reproches, los errores se matizan, sólo queda la obra de la gran mujer ausente que ha dejado un gran legado a sus hijos.
El cuerpo que es la morada material del alma yace bajo la tierra, pero la encomienda persistirá por siempre en el corazón de hijas e hijos. Al finalizar las autoridades encargadas de este rubro explicaron que se realizaron acciones de limpieza de los lugares comunes y esperan que hoy la afluencia de los visitantes continúe.
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