Ante la omisión de la Máxima Casa de Estudios en denuncias de acoso sexual, alumnas de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) y de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) comenzaron a movilizarse a través de asambleas, paros activos e inactivos y clausuras simbólicas.