Orizaba.- Primero fue el Seguro Social el que discriminó a Iván Cortés Gómez, quien por ser invidente lleva un perro lazarillo, le impidieron la entrada al Hospital; después fue en una tienda de autoservicio donde corrió la misma suerte para realizar sus compras, y ahora los transportistas se sumaron a la violación de sus derechos, un autobús de la línea Garita, propiedad del alcalde de Ixtaczoquitlán, Aquileo Herrera, se negó a darle el servicio que solicitaba.
El mismo Iván Cortés recordó que hasta la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), justificó al personal que desconoce, pero además se niega a conocer el derecho de las personas débiles visuales y ni se diga el de los animales.
El 23 de mayo se cumplió un año que en el Hospital del IMSS, el personal de seguridad le negó la entrada a Iván, pero como conoce sus derechos, denunció los hechos tanto en los medios de comunicación como ante la CNDH.