AGENCIA
Veracruz.- Veracruz se ha consolidado como uno de los estados más afectados por el incremento de casos de dengue en México durante 2024. Según datos oficiales de la Secretaría de Salud, hasta la semana 49 del año, el estado concentra una parte significativa de los más de 120 mil casos acumulados a nivel nacional.
Las condiciones climáticas desfavorables y las debilidades en la infraestructura para el manejo de agua han propiciado un entorno favorable para la proliferación del mosquito Aedes aegypti, el principal vector del virus del dengue. Este panorama se agrava en regiones con menor capacidad hospitalaria, donde el sistema de salud se encuentra bajo una intensa presión.
El dengue ha alcanzado niveles alarmantes en el país, con un crecimiento exponencial en los últimos cinco años. Veracruz figura entre los estados más críticos, junto a Jalisco, Nuevo León, Guerrero y Michoacán, lo que ha convertido esta enfermedad en una de las mayores amenazas para la salud pública en el país.
Según el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud, hasta la fecha se reportan 66 mil 401 casos de dengue sin signos de alarma, 50 mil 578 con signos de alarma y 3 mil 952 casos severos que requieren hospitalización y atención intensiva. Estas cifras representan un incremento significativo en comparación con el año 2023, cuando se registraron alrededor de 50 mil contagios en total. En términos porcentuales, esto equivale a un aumento del 143.9 por ciento (%) en los casos sin signos de alarma, 128% en los casos con signos de alarma y un dramático 159% en los casos severos.
La tendencia de aumento en los contagios no es nueva, pero ha ido en aceleración desde 2020, cuando el país reportó aproximadamente 80 mil casos. Factores como el clima, las condiciones sociales y las deficiencias en la infraestructura han favorecido la proliferación del mosquito Aedes aegypti, particularmente en estados como Veracruz y Guerrero, que cuentan con servicios de salud limitados.
La distribución geográfica del dengue en 2024 señala que las regiones con clima cálido, alta densidad poblacional y problemas en la gestión del agua son las más vulnerables. Años de sequía extrema han contribuido a temperaturas más elevadas, favoreciendo así la reproducción del mosquito. De acuerdo con el Monitor de la Sequía en México, se anticipa que las condiciones se agudicen en 2025, con una sequía severa proyectada para los primeros cinco meses del año.
Ante esta alarmante situación, es crucial que se implementen medidas efectivas para el control del dengue y se fortalezcan los servicios de salud en las regiones más afectadas. El gobierno y las autoridades sanitarias deben priorizar la atención de esta crisis y trabajar en la prevención y educación sobre el dengue para reducir su impacto en la población.
