
Laura A. García
El Buen Tono
Amatlán.- Habitantes de las colonias Divino Niño, San Isidro y otras aledañas pertenecientes a Paraje Nuevo, registran una crítica escasez de agua potable desde la semana anterior, situación que generó malestar entre la población.
Los afectados responsabilizaron al ayuntamiento que preside, Luis Arturo Figueroa Vargas, por su holgazanería para garantizar un servicio básico y continuo.
Reportaron que, en temporada de calor, el suministro es irregular o nulo, obligándolos a recurrir a los piperos, tambos de almacenamiento, o comprar garrafones a precios elevados para cubrir sus necesidades más básicas.
“No es la primera vez que pasa, pero ahora llevamos una semana sin agua. ¿Cómo quieren que vivamos así?”, reclamó María López, residente de la colonia Divino Niño.
El problema se produjo porque se quemó la bomba, y aunque las autoridades aseguraron que realizarían acciones de mantenimiento, incumplieron.
En tanto, otros denunciaron fugas de agua, luego de que las mangueras por las que realizan el suministro se rompieron, lo que hace que se pierdan varios litros por segundo.
Otros pobladores indicaron que, cuando el servicio llega, es insuficiente y con baja presión, lo que evidencia la falta de mantenimiento en la red hidráulica y la poca capacidad de respuesta de las autoridades.
“El ayuntamiento omite hacer su trabajo, lo que también es corrupción. Las tuberías son obsoletas, se niegan a invertir, porque todo se lo roban, y nadie da soluciones”, denunció otro habitante afectado de San Isidro.
