JHENNIFER RENAUD
El Buen Tono
Orizaba.- El combate al fuego en la región de las Altas Montañas llegó tarde y con pocos resultados, señalaron los pobladores víctimas de este desastre natural que consumió más de 1600 hectáreas de bosques así como casas y el hogar de decenas de familias que quedaron vulnerables.
La situación se podría haber evitado o contenido a tiempo si la Secretaría de Protección Civil del estado de Veracruz estuviera equipada con las unidades adecuadas para el combate a estas amenazas de la naturaleza.
Tarde y con tan solo un helicóptero con el método “Bambi Bucket”, con capacidad limitada de agua, se recorrió la zona intentando sofocar las llamas que superaban en mucho las acciones de Protección Civil, el helicóptero del Gobierno Estatal adscrito a la Fuerza Civil, debido a la Surada comenzó por la tarde del lunes con la sofocación de los incendios forestales. Éste tenía un balde que descendía de forma plegable para recolectar agua de la laguna del Rincón de las Doncellas.
Ante la magnitud del problema y tras ver que esta unidad no estaba extinguiendo del todo el caos, fue necesario llamar a otro helicóptero que reforzará las labores en al menos 14 puntos de los municipios de Huiloapan, Maltrata, Nogales, Camerino Z Mendoza, fue hasta el miércoles que fue el arribo de un helicóptero de la Secretaría de Marina. Sin embargo existen equipos y unidades mejor equipadas para la realización de estas tareas de rescate, unidades que utilizan otros países cuando enfrentan catástrofes de esta magnitud, responden de manera inmediata y logran mitigar la contingencia de una manera más rápida sin permitir que se extienda, como pasó en esta ocasión en la zona de las Altas Montañas.
El helicóptero
Sikorsky Firehawk es utilizado por el Departamento de Bomberos de Los Ángeles, es ejemplo de esto, pioneros en la extinción de incendios en Estados Unidos, sin embargo en México los recursos son utilizados en obras fantasmas y elefantes blancos, en lugar de invertir en unidades de primera línea que puedan salvar vidas.
