En un giro sorprendente del destino, una pareja residente en Colorado, Estados Unidos, ha dejado al mundo boquiabierto al revelar que, además de unirlos el amor, comparten un lazo de parentesco genético: ¡son primos! Joseph y Celia Quiñones, quienes llevan once años de feliz matrimonio, se enteraron de este extraño parentesco durante unas pruebas genéticas rutinarias para estudios de salud.
El descubrimiento, aunque impactante, no ha perturbado la sólida relación de la pareja. Decidieron abordar la situación con valentía y transparencia, compartiéndola de inmediato en sus redes sociales para enfrentar cualquier posible estigma. “Me siento un poco más libre. Hay personas que aman sin importar qué o a quién, entonces, ¿por qué no puedo amar a mi primo por accidente?”, expresó Celia en una entrevista con la revista ‘People’.
A pesar de la revelación, Joseph y Celia confesaron que nunca sospecharon de su parentesco antes de su boda, ya que no habían coincidido en reuniones familiares previas ni tenían conocimiento de su conexión genética. “Terminamos celebrándonos nuestra boda, e incluso entonces, nuestras abuelas se parecían mucho y se llevaban bien”, compartió Celia.
Aunque la noticia inicialmente suscitó preguntas sobre el futuro de su relación, la pareja decidió permanecer unida. “¿Deberíamos divorciarnos? ¿Se supone que debemos estar juntos? Empecé a repensar y luego, después de un tiempo, dije: ‘No, solo nos quedaremos juntos’. No hay nada que podamos hacer al respecto. No voy a dejar que un poco de sangre se interponga entre nosotros”, afirmó Celia.
El caso de Joseph y Celia se volvió viral después de que ella compartiera su historia en TikTok, provocando una mezcla de críticas y burlas. Sin embargo, la pareja se mantiene firme en su amor y compromiso, desafiando los convencionalismos sociales y recordándonos que el verdadero amor trasciende cualquier barrera, incluso la del parentesco genético.
