CÓRDOBA.- El 10 de noviembre, una mujer dejó estacionado su vehículo Sentra 2017, para acudir por su hija que se encontraba en la guardería, no obstante, fue alertada por los vecinos de que su auto estaba en llamas.
A pesar de que puso su queja por servicio, garantía (de punta a punta los primeros dos años) y que la misma aseguradora y Protección Civil, hasta el asesor de la Nissan, coincidieron y dijeron que fue un error de agencia, ya que el fuego inició en una puerta trasera con un corto (JUSTO DONDE VA EL PORTABEBÉ), a la marca Nissan no le ha importado el riesgo a la cual fueron expuestas tanto sus hijas como ella, así como los padres y niños de la guardería, pues no quiere hacerse responsable.
Todavía tiene que soportar el mal trato en el call center, quienes no le han informado del peritaje final.
La usuaria, quien está decepcionada de haber comprado con esta marca, también denunció que tampoco Nissan ha podido proporcionar una unidad para que no se vea afectada en su movilidad, porque no “tienen coches disponibles” y sólo le han dicho que van a ver si el martes o miércoles, hay alguno que puedan prestarle.
Pero otro grave problema de esta compañía es que le advirtieron que si llegaran a reponer la unidad tiene que pagar la baja de placas del coche incendiado, la alta de placas del nuevo coche, el seguro por un año, deducible y la diferencia, porque tal vez no esté en el mismo costo que cuando se le entregó el Sentra.
Es el colmo, todavía que es error de fabricación, tiene que volver a pagar todo de nuevo.