AGENCIA
India.- Shreya Siddanagowder, es una joven a la que le habían amputado ambos brazos, tiempo después le ofrecieron nuevas manos, la estudiante no dudó ni un segundo en aceptar la oferta, a pesar de que se trataba no sólo de un par de manos grandes, oscuras y belludas, sino que pertenecían a un hombre, pero los resultados del trasplante están sorprendiendo a la ciencia.
Sus nuevos brazos no solo se han vuelto más esbeltos, sino que también han cambiado de color para combinar con el tono de su piel, desconcertando a los médicos, quienes realizaron este inusual trasplante, el cual tuvo una duración de 13 horas.
Cuando esta historia se dio a conocer, se supo que “el donante era un hombre alto, con dedos grandes y delgados”, dijo Sumat, la madre de Siddanagowder, desde su casa en Pune, en el oeste de India.
“Ya nadie se da cuenta de que son brazos de hombre… Incluso ha empezado a llevar bisutería y esmalte de uñas”.
HECHOS
La vida de Siddanagowder dio un giro en 2016 cuando, a los 18 años, se vio involucrada en un accidente de autobús que le aplastó ambos brazos.
Una demora al recibir los primeros auxilios trajo como consecuencia que ambos brazos le fueran cercenados por debajo del codo.
PARA SABER
En todo el mundo solo se han realizado con éxito 200 trasplantes de manos, incluidos nueve en la India, desde el primero en Estados Unidos en 1999, en un hombre cuyo miembro inferior izquierdo había sido volado por un fuego artificial.
El primero en India se realizó en 2015 en el Amrita Institute of Medical Science (AIMS) en el estado sureño de Kerala, donde la familia de Siddanagowder la llevó.
LA BÚSQUEDA
Por razones culturales, las familias indias se resisten a que las manos de sus seres queridos se vuelvan “disponibles” después de su muerte.
“Por lo general, hay que esperar mucho tiempo”, dijo Subramania Iyer, miembro del equipo de médicos que operaron a Siddanagowder.
Esto da como resultado que quienes buscan un trasplante “están tan desesperados que no les importa si las manos son de otro género”, dijo Iyer, especialista en cirugía reconstructiva.
Finalmente, el hospital obtuvo un par de manos de un hombre en agosto de 2017; Siddanagowder y su familia los aceptaron.
CIRUGÍA
Las manos del donante fueron primero unidas por los huesos, antes de que los tendones, los vasos sanguíneos y la piel fueran cuidadosamente cosidos; después del trasplante, tuvo que someterse a más de un año de fisioterapia corporal y cerebral para acostumbrarse a las nuevas manos y a conseguir movilidad.
