
Entre lágrimas de alegría y alivio, la señora Amada Romero vivió este Jueves Santo uno de los momentos más emotivos de su vida: el reencuentro con su amado perrito “Budín”, un chihuahua que le fue arrebatado en febrero y cuya ausencia la sumió en la tristeza durante más de dos meses.
El robo ocurrió el pasado 13 de febrero en la colonia 21 de Abril, en la ciudad de Veracruz. Como cada tarde, Budín salió al frente del domicilio ubicado sobre la avenida Miguel Ángel de Quevedo, entre J. B. Lobos y Alcocer, para tomar el aire. En un breve descuido, mientras la señora Romero atendía una llamada telefónica, una persona descendió de un vehículo gris y, con total alevosía, se llevó al animal. El hecho fue captado por cámaras de seguridad de viviendas vecinas.
Gracias al apoyo de medios de comunicación locales y la difusión masiva en redes sociales, el caso cobró notoriedad y generó empatía entre cientos de ciudadanos, quienes compartieron la historia con la esperanza de encontrar a Budín.
Ayer jueves, alrededor de las tres de la tarde, la historia dio un giro inesperado. El mismo vehículo involucrado en el robo reapareció en la zona. Una persona descendió rápidamente, abrió la cajuela y dejó al perrito sobre la banqueta, justo frente a su hogar. Nuevamente, el acto quedó registrado por cámaras de seguridad.
La señora Amada agradeció profundamente a los medios de comunicación de la conurbación Veracruz-Boca del Río por la difusión del caso, convencida de que fue gracias a esa visibilidad que su fiel compañero pudo regresar sano y salvo.
Hoy, el corazón de una mujer de la tercera edad late con más calma. Budín está de vuelta en casa, y con él, también regresó la paz a un hogar que nunca dejó de esperarlo con amor y esperanz
