Córdoba.- Concesionarios del servicio de transporte público, afirmaron que no podrán iniciar con la renovación de unidades, si el Gobierno del Estado no les ofrece un apoyo “real” ante el tema de los gasolinazos.
Se estima que el 50 por ciento de las ganancias se destinan a la compra del diésel y el resto para gastos de mantenimiento y salarios del personal.
De acuerdo con el empresario transportista, Toribio Tress Zilli, aunque el servicio en Córdoba ha alcanzado su mayor crecimiento en la última década, al registrar hasta un 15 por ciento más de demanda entre los meses de enero y febrero, los constantes aumentos de los combustibles mantiene un freno en el desarrollo del servicio.
Insistió que aunque es notorio el crecimiento en la demanda, dicho beneficio aún no se alcanza a vislumbrar, toda vez que los empresarios del ramo tiene que destinar el 50 por ciento de las ganancias sólo en la compra de combustibles.
Reiteró que ante este panorama, es urgente que el Estado desarrolle un verdadero plan de apoyo para el sector transportista, pues aunque se tiene en puerta el programa de renovación del parque vehicular, no hay apoyos para que los empresarios puedan adquirir las nuevas unidades, al recordar que además de los altos costos no se les han entregado apoyos de ninguna índole. Expuso que un minibús nuevo cuesta más del millón de pesos, inversión que será difícil de “absorber”, sobre todo porque tienen que considerar las tasas de interés, los precios del dólar, la compra de herramientas, entre otros gastos que se generan por el mantenimiento de las unidades. Así como los efectos de la competencia desleal que les causa el uso de taxis colectivos.