Córdoba.- En busca de obtener el perdón del actual partido que gobierna en Veracruz, el diputado local emanado del PRI, Juan Manuel Del Castillo González, ha iniciado con una serie de traiciones evitando a toda costa ser investigado por el millonario desvío de recursos que realizó mientras fue el titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación, entregando en “charola de plata” los municipios de la zona Centro del Estado al PAN.
El Legislador ha buscado vender su posición a los operadores del PAN y a cambio se ha dedicado a “operar” y “menear los hilos” en los municipios de Amatlán de los Reyes, Fortín y Córdoba, donde intenta colocar a los candidatos que estarían perdiendo en la siguiente contienda, garantizando el triunfo para Acción Nacional, ganando así el “perdón” de las esferas estatales.
En el caso de Ama-tlán incluso apoya a un exconvicto que salió huyendo de Estados Unidos, mientras que en Córdoba se ha encargado del entierro político de Sergio de la Llave Migoni y lo mismo sucede en Fortín, tras el pacto que ha obtenido en lo “obscurito” con los panistas a quienes les ha ofrecido a cambio de no ir a la cárcel o el desafuero, el triunfo en estos tres municipios, donde se agrega Yanga, municipio operado por Cecil Duarte de Ochoa, hermano del prófugo gobernador Javier Duarte de Ochoa.
De esta forma, Del Castillo González ha realizado una serie de acuerdos para así asegurar el triunfo a quienes serán los abanderados del PAN, evitando la cárcel y desafuero que alcanzaría por malversación de fondos y la creación de empresas “fantasma”, con lo que fue desfalcado el Estado.