Este año, los cielos de España han sido testigos de un espectáculo natural sin precedentes: auroras boreales deslumbrando en zonas inusuales, como Madrid, Segovia y Salamanca. Lo que normalmente es un fenómeno exclusivo de las regiones árticas, ahora ha maravillado a miles de personas en el sur de Europa, en un evento causado por la reciente actividad solar.
En mayo, una tormenta solar provocó que las auroras fueran visibles en ciudades como Madrid y Extremadura, sorprendiendo a residentes y turistas que nunca antes habían visto este impresionante fenómeno en sus cielos. Ahora, una nueva ola de actividad solar ha permitido que estas luces celestiales vuelvan a aparecer, pintando de colores vibrantes los cielos nocturnos de España.
¿Qué ha provocado estas auroras boreales en España?
El origen de este fenómeno está relacionado con una llamarada solar de tipo X1.8 que ocurrió a mediados de semana. Aunque no es la más fuerte registrada recientemente, esta llamarada estuvo acompañada de una eyección de masa coronal (EMC), que generó condiciones atmosféricas ideales para que las auroras se vieran en áreas tan al sur como España. Esta eyección interactuó con el campo magnético terrestre, creando tormentas geomagnéticas que facilitaron la visibilidad de las auroras.
Según la NOAA, la tormenta geomagnética alcanzó una categoría G4 en una escala donde G5 es el máximo, y se prevé que el índice Kp, que mide la intensidad de estas tormentas, llegue a 8 de 9. Esto explica por qué las auroras boreales se han podido observar mucho más allá de los habituales territorios polares.
Los cielos iluminados: Una maravilla inesperada
Miles de españoles aprovecharon la oportunidad de fotografiar este fenómeno único y compartieron sus imágenes en redes sociales. Lugares como Ávila, Segovia y zonas rurales de Extremadura fueron los mejores puntos para disfrutar de este espectáculo luminoso, lejos de la contaminación lumínica de las grandes ciudades.
Los residentes de estas áreas rurales quedaron maravillados ante la vista de luces danzantes que tiñeron el cielo de tonos verdes, rojos y púrpuras, un evento que ha generado asombro y fascinación. “Nunca pensé que vería una aurora boreal sin tener que viajar al Ártico”, comentó una residente de Salamanca.
La magia del Ciclo Solar 25
Este evento resalta no solo la belleza natural de nuestro planeta, sino también la conexión entre la actividad solar y la atmósfera terrestre. Las auroras boreales, que durante siglos han capturado la imaginación de muchos, están siendo vistas por más personas en el mundo debido al aumento de la actividad solar en el Ciclo Solar 25.
A medida que este ciclo continúa, los expertos no descartan que podamos seguir presenciando auroras boreales en lugares inusuales. Mientras tanto, los cielos españoles han sido un lienzo perfecto para este espectacular fenómeno que, sin duda, ha dejado una marca imborrable en quienes tuvieron la suerte de verlo en vivo.