TikTok se encuentra en una encrucijada crítica en EE.UU., enfrentando una ley que podría obligar a la red social a desaparecer del país a partir de enero del próximo año. La Corte de Apelaciones del Distrito de Columbia ha iniciado hoy la revisión de la demanda interpuesta por TikTok y su matriz, ByteDance, para evitar que la legislación aprobada en abril entre en vigor.
La ley, que el Congreso aprobó en abril, requiere que ByteDance, la empresa matriz de TikTok, se desvincule de su operación en China o se enfrente a una prohibición en EE.UU. Según la normativa, ByteDance tiene hasta el 19 de enero para encontrar un inversor en un país no considerado como un “adversario” de EE.UU. para vender sus operaciones en el país. De no cumplir, TikTok tendría que cesar sus actividades en suelo estadounidense.
El Gobierno de Joe Biden y congresistas de ambos partidos temen que el Gobierno chino pueda utilizar ByteDance para recopilar datos de usuarios en EE.UU. o manipular la opinión pública estadounidense a través de la plataforma. Sin embargo, durante la audiencia, el abogado de TikTok, Andrew Pincus, defendió la red social argumentando que la empresa está comprometida con la protección de los datos de sus usuarios y cuestionó la evidencia presentada por el Gobierno sobre un posible riesgo a la seguridad nacional. Pincus también argumentó que la ley podría violar la Primera Enmienda de la Constitución, que protege la libertad de expresión.
En caso de que TikTok sea prohibida, las principales tiendas de aplicaciones como App Store y Google Play tendrían que eliminar la plataforma de sus catálogos, impidiendo que millones de usuarios estadounidenses puedan descargar la aplicación o recibir actualizaciones.
A pesar de la fecha límite del 19 de enero, el presidente Biden tiene la opción de extender el plazo hasta tres meses adicionales si certifica que ByteDance está realizando avances significativos hacia la venta. Además, tanto TikTok como el Departamento de Justicia han solicitado a la corte de apelaciones que emita un fallo antes del 6 de diciembre para permitir que el Tribunal Supremo considere cualquier apelación antes de la fecha límite.
El caso se desarrolla en la recta final de las campañas electorales del 5 de noviembre, con ambos candidatos, Donald Trump y Kamala Harris, utilizando activamente TikTok para conectar con los votantes jóvenes.
