La popular red social TikTok solicitó este lunes a la Corte de Apelaciones de Washington que detenga la implementación de una ley que amenaza con prohibir su operación en Estados Unidos. La medida, aprobada por el Congreso en abril, exige que la plataforma se desvincule de su empresa matriz, ByteDance, antes del 19 de enero de 2025. De no cumplir, TikTok será prohibida en el país.
En su escrito, TikTok pidió a la Corte conceder una medida cautelar que impida a la Administración del presidente Joe Biden aplicar la ley, argumentando que no existe una amenaza inminente para la seguridad nacional y que la entrada en vigor de la norma podría generar “daños irreparables” tanto para la plataforma como para los millones de usuarios estadounidenses.
Una batalla legal en la antesala de un cambio presidencial
La fecha límite, el 19 de enero, coincide con el último día del mandato de Biden, lo que añade un tinte político al caso. TikTok considera que la paralización de la ley permitiría a la Administración del presidente electo Donald Trump analizar la situación y determinar su postura.
“Una medida cautelar no impondrá ningún perjuicio”, asegura la red social en su solicitud, y señala que el Congreso, al aprobar la ley, reconoció que la amenaza no es inmediata al establecer un plazo de nueve meses para su cumplimiento.
El temor detrás de la normativa radica en la posibilidad de que el Gobierno chino, a través de ByteDance, acceda a información sensible de usuarios estadounidenses y manipule la opinión pública. Esta preocupación bipartidista unió a congresistas demócratas y republicanos en apoyo a la medida.
Trump y TikTok: ¿un cambio de rumbo?
Durante su primer mandato, Donald Trump intentó prohibir TikTok sin éxito, pero en la reciente campaña electoral aseguró que, de ser elegido, “salvaría TikTok en Estados Unidos”. Sin embargo, tras su victoria en noviembre, no se ha pronunciado oficialmente sobre el caso.
La plataforma insiste en que la ley se basa en suposiciones y no en pruebas de que China esté utilizando TikTok con fines perjudiciales. Mientras tanto, el reloj avanza, y el futuro de TikTok en Estados Unidos depende de una decisión judicial y de las acciones de la próxima Administración.
Con millones de usuarios y un impacto cultural innegable, el destino de TikTok podría marcar un precedente en las relaciones entre Estados Unidos y empresas tecnológicas extranjeras. Por ahora, queda esperar la resolución de la Corte Suprema y la postura que adopte el próximo presidente.