Monterrey.- Tigres está en semifinal de la Copa Libertadores, certamen en el que ningún equipo mexicano ha logrado ganar, por lo que el club felino en busca de hacer historia, abrió su chequera, gastando más de 18 millones de dólares por refuerzos.
No conformes con adquirir la “bomba” del draft, que fue Jürgen Damm del Pachuca, se hizo del delantero francés, André-Pierre Gignac y del nigeriano Ikechukwu Uche, con ellos fichados, los dirigentes felinos dijeron que seguía en pie la negociación por Javier Aquino, y también se dio.
Damm costó a Tigres 8 millones de dólares, Aquino salió en 5.5 y Uche en 4.1, para un total de 17.6 mdd. Jairo González llegó a préstamo de Leones Negros por una cifra cercana a los 500 mil dólares, según informaron fuentes cercanas a las negociaciones.
El caso de Gignac es especial, el jugador terminó su relación laboral con Olympique Marsella, Tigres lo fichó como jugador libre, por lo que no pagó por una transferencia, sin embargo, el salario será altamente elevado, en 4 millones de euros anuales.
Enrique Esqueda ya no le costó al club felino, pues la extensión de su préstamo se dio a cambio de Hugo Rodríguez, quien pasó en la misma condición al Pachuca.