AGENCIA
Japón.- El tifón Lan atravesó hoy martes el oeste de Japón, donde ha provocado fuertes lluvias y paralizado el transporte aéreo y ferroviario en una jornada que coincide con una importante festividad japonesa, además de dejar una veintena de heridos y miles de evacuados.
Según la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), Lan, el séptimo tifón de la temporada en el Pacífico, que se desplaza ya degradado a tormenta tropical severa, tocó tierra alrededor de las 5:00 de hoy (20:00 GMT del lunes) en la prefectura occidental de Wakayama, y continuó su trayectoria hacia el norte.
Debido a la llegada del frente se ha declarado la alerta meteorológica de distintos niveles en varias regiones del oeste y el centro de Japón, ante el riesgo de inundaciones y de desplazamientos de tierra y otros accidentes derivados de las lluvias torrenciales y los vientos de más de 100 kilómetros por hora (km/h).
Las autoridades niponas también han emitido órdenes de evacuación en distintas localidades de una decena de prefecturas, lo que afectas a miles de personas e incluye áreas de ciudades del oeste del país como Osaka, Nara, Kioto o Kobe.
Las fuertes lluvias, que podrían superar los 400 milímetros en las regiones de Tokai y Kansai, están dejando áreas inundadas y crecidas de ríos y canales.
El frente ha causado incidentes como la formación de un tornado en Shizuoka (centro) que volcó varios vehículos, hiriendo a uno de los pasajeros, o el desborde de un río que se llevó por delante un puente en Kioto (oeste).
Al menos una veintena de personas han resultado heridas en diversos accidentes causados por las condiciones meteorológicas extremas, entre ellos un hombre de unos 60 años aplastado por una pared que se desprendió y quien se encuentra inconsciente.
Según la compañía Kansai Electric Power, cerca de 50 mil hogares sufrieron cortes de luz en la región de Kansai hoy martes y la empresa se encuentra tratando de restaurar el acceso.
Las aerolíneas niponas anunciaron hoy la cancelación de unos 560 vuelos procedentes o con destino al oeste del país, dejando en tierra a más de 50 mil pasajeros.
Además, unas 650 personas se vieron obligadas a pasar la noche de la víspera en el aeropuerto de Kansai (oeste), después de que todos los accesos al aeródromo situado en una isla artificial frente a la ciudad de Osaka quedaran bloqueados debido al tifón.
También se suspendieron todas las operaciones entre las estaciones de Nagoya y Okayama, incluidas las de los trenes de alta velocidad (shinkansen), y el servicio entre Tokio y Nagoya fue significativamente reducido.
La llegada del tifón a Japón ha coincidido con el período festivo del Obon, en el que se recuerda a los difuntos y durante cuya celebración se produce un elevado número de desplazamientos para reuniones familiares.
Lan llega poco después del paso de Khanun, el tifón anterior de la temporada, que en las últimas dos semanas azotó el sudoeste del archipiélago nipón y la península de Corea, dejando amplias inundaciones, numerosos daños materiales y varios fallecidos.