AGENCIA
EEUU.- Doug Ford, primer ministro de Ontario, advirtió sobre medidas drásticas contra Estados Unidos si Donald Trump, presidente electo, implementa los aranceles que ha prometido. Entre las posibles represalias, Ford mencionó frenar las exportaciones de energía de Ontario hacia Estados Unidos, restringir la compra de alcohol estadounidense por parte de la Junta de Control de Bebidas Alcohólicas de Ontario (LCBO) y limitar las exportaciones de minerales críticos canadienses.
Además, se evalúa prohibir que empresas estadounidenses participen en compras provinciales. Estas acciones reflejan la respuesta de Ontario ante lo que Ford describe como un ataque directo al sustento económico de la provincia y de Canadá.
A pesar de las amenazas, Ford dejó claro que suspender las exportaciones de electricidad sería una medida extrema. “Estamos enviando un mensaje a Estados Unidos… Si vienen y atacan a Ontario, si atacan los medios de vida de nuestra gente, usaremos todas las herramientas disponibles para defender a los habitantes de Ontario y los canadienses”, aseguró.
Ford también calificó las acciones de Trump como un golpe traicionero: “Es como si un miembro de la familia te apuñalara directamente en el corazón”.
En entrevista con CNBC News, Trump respondió con indiferencia ante las advertencias de Ford, señalando: “Está bien que Ford haga eso, está bien. Estados Unidos está subsidiando a Canadá… no deberíamos tener que hacerlo”. Aunque no presentó evidencia, afirmó que Estados Unidos destina más de 100 mil millones de dólares al año a subsidiar a Canadá.
La primera ministra de Alberta, Danielle Smith, rechazó la idea de cortar las exportaciones de energía de su provincia, calificándola de contraproducente. “Bajo ninguna circunstancia Alberta aceptará cortar las exportaciones de petróleo y gas. Preferimos la diplomacia a las amenazas”, afirmó.
Por su parte, Andrew Furey, primer ministro de Terranova y Labrador, adoptó una postura cautelosa, preparándose para posibles repercusiones. “Esperamos que no sea más que una exageración”, comentó, mientras su gobierno toma medidas preventivas ante un posible aumento de tensiones.
Las amenazas de Ford y las reacciones en ambas naciones subrayan el impacto que los aranceles de Trump podrían tener en la relación comercial entre Canadá y Estados Unidos, especialmente en sectores clave como la energía y los minerales críticos.