De la Redacción
El Buen Tono
Calcahualco.- La tala indiscriminada en el Parque Nacional Pico de Orizaba alcanzó niveles alarmantes, generó una preocupación creciente entre la sociedad y los turistas que visitan este importante espacio natural, manifestaron ambientalistas de la zona.
A pesar de las áreas protegidas designadas por el Gobierno Federal, la falta de medidas eficaces permite que la actividad maderera ilegal prospere, acusaron ambientalistas.
La deforestación, añadieron, causó una disminución notable en los recursos hídricos locales, siendo el río Jamapa uno de los más afectados.
La reducción del caudal plantea una amenaza directa para la flora y fauna de la región, así como para las comunidades que dependen de los recursos acuíferos, subrayaron los entrevistados.
Además de la tala desmedida, se puso en evidencia un preocupante aumento en la acumulación de desechos y basura en los barrancos y caminos del parque.
La falta de conciencia ambiental por parte de algunos visitantes contribuyó a tal problema, sin que las autoridades estatales o federales hayan implementado acciones efectivas para contrarrestarla, dijeron.
Precisaron que algunos visitantes comparten imágenes que muestran la triste realidad de la contaminación, y la degradación ambiental en esta área protegida.
A pesar de la gravedad de la situación, instancias gubernamentales como la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), la del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), parecen no tomar medidas significativas.
Hicieron un llamado urgente a las autoridades para que frenen el daño ambiental.
