Efraín Hernández
El Buen Tono
Córdoba.- En respuesta a las inquietudes y preocupaciones de la ciudadanía, el Ayuntamiento de Córdoba, liderado por el presidente municipal Juan Martínez Flores, tomó la decisión de suspender el programa de alcoholímetro y eliminar los retenes de Tránsito. La medida, según el edil, busca atender las demandas de los cordobeses y fortalecer la confianza entre la población y las autoridades.
“Escuchamos las quejas de la ciudadanía, quienes manifestaron inconformidades hacia los operativos. Decidimos suspenderlos como parte de un ejercicio de diálogo y entendimiento”, señalo.
Enfatizó que, aunque esta suspensión ha registrado un aumento en los accidentes viales relacionados con el consumo de alcohol, el gobierno municipal ha redoblado esfuerzos para promover la educación vial y la responsabilidad en la conducción. “La estrategia se enfoca en prevenir incidentes a través de campañas informativas y un llamado constante a evitar el manejo bajo los efectos del alcohol”, manifestó.
En ese contexto el presidente municipal destacó que, además de atender las demandas sociales, la medida busca impulsar el turismo, una actividad clave para la economía local. “Queremos que Córdoba sea vista como una ciudad hospitalaria y segura, tanto para los habitantes como para quienes nos visitan”, afirmó.
Basta hacer mención que, como parte de las acciones para mejorar la percepción ciudadana, las autoridades municipales también iniciaron el proceso de depuración en el cuerpo de Tránsito, dando de baja a cuatro elementos por presuntas irregularidades y manteniendo investigaciones para garantizar un desempeño ético y transparente.
Con esta decisión, Córdoba apuesta por la corresponsabilidad ciudadana como pieza clave para garantizar la seguridad vial, confiando en que el diálogo y la participación social serán fundamentales para construir una ciudad más unida y consciente.
