Washignton.– Los estados de Kansas y Missouri declararon ayer el estado de emergencia ante la “súper tormenta de nieve” que está azotando el medio oeste de Estados Unidos, donde están cerrados aeropuertos, oficinas y escuelas, además de cientos de kilómetros de carreteras.
En Kansas, la nieve acumulada llegó hasta los 30 centímetros. El Aeropuerto Internacional de Kansas City tuvo que suspender sus operaciones y la mayoría de las escuelas del estado, al igual que las de Missouri, permanecían cerradas.
La gobernadora de Kansas, Sam Brownback, ordenó el cierre de todas las oficinas estatales, excepto para el personal esencial.
Por su parte, el gobernador de Missouri, Jay Nixon, declaró el estado de emergencia y activó el Centro de Operaciones de Emergencia del Estado.
La declaración, tanto de Kansas como de Missouri, permite a las agencias estatales que se coordinen directamente con las ciudades y condados para proporcionar servicios de emergencia.
Varios accidentes han sido atribuidos a las carreteras heladas que ha dejado la tormenta, incluyendo uno en Oklahoma en el que murió un adolescente ayer miércoles.
Para las próximas horas las advertencias por la tormenta se extienden a estados más orientales como Illinois.
El Servicio Meteorológico Nacional espera que el impacto de la tormenta disminuya a medida que se dirija hacia el este del país.
Agencias