Los bombardeos y ataques de artillería en Ghouta Oriental, último bastión rebelde en las afueras de Damasco, han dejado en tres días casi 200 muertos, entre ellos 57 niños, así como más de 850 heridos, tan sólo hoy 49 decesos, denunció el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
De las 194 víctimas mortales, al menos 49 personas murieron este martes en ataques aéreos de las fuerzas leales al régimen sirio, mientras 127 civiles perdieron la vida el lunes, incluidos 39 niños, en la jornada más sangrienta para Ghouta Oriental en cuatro años, en tanto 18 fallecieron el domingo.