Orizaba.- Discriminación, abandono y violencia física, es la realidad que enfrentan los ancianos actualmente, además de que son a los que más afecta la crisis económica, manifestó la directora del Asilo Santa Isabel, sor Irene Cornago Bertrán.
Dijo que en su caso, atienden a un promedio de 90 adultos mayores, pero a la mayoría los abandonaron sus familiares prácticamente desde el día en el que los llevaron al lugar.
“Los familiares ya no regresaron para saber si todavía viven o ya se murieron, por eso decimos que es muy pobre el que nunca tuvo nada, pero es más pobre el que ha tenido y se ha quedado sin nada”, expresó.
Explicó que su misión es cuidar a los ancianos, quienes son los más necesitados y despreciados del mundo, “porque sus familias dicen que no sirven para nada, sin saber que nos dejaron todo lo que tenemos”.
Indicó que reciben a senectos que no conocen a Dios, que carecen de todo sacramento y que los tienen que evangelizar a esa edad, porque quieren que después de su muerte tengan una vida eterna.
Destacó que en la casa hogar gracias a Dios y a la voluntad del Patronato, que conforman amas de casa altruista, no les falta nada, porque aparte de dedicarles un tiempo, trabajan para ayudar a los ancianitos quienes muchas veces llegan sin nada.
“Aquí adentro no saben cómo está el mundo si hay secuestros, si hay necesidad en los pueblos, ellos no saben nada porque a ellos no les falta nada; nosotras salimos a recoger la limosna que nos dan y procuramos que a ellos no les falte nada a pesar de que la vida sea dura allá afuera”.
Platicó del caso de una abuelita que llegó al asilo golpeada por el hijo de la dueña de la casa donde trabajaba, quien la arrojó al piso y le dio un trato muy severo.
Mencionó que en la mayoría de los casos son los hijos quienes ya no quieren saber nada de sus padres, por lo que los arrumban en un cuarto viejo o los suben a la azotea en espera de su muerte para dejar de atenderlos.
Omar Celiseo V.
El Buen Tono
Son senectos
prueba de vida
Orizaba.- Los abuelitos son un testimonio de vida y pilar del hogar, desafortunadamente algunos sufren de abandono, desprecio y violencia psicológica, reconoció la presidenta del DIF, Lizette Kuri de Chahín.
Dijo que cada persona de la tercera edad forma parte de un núcleo familiar y no se le debe considerar únicamente como un ser de etapas que ya pasaron, “merecen respeto y reconocimiento porque en la vida actual muchos jóvenes carecen de los valores básicos o se confunden con respecto a ellos”.
Reconoció que algunos de ellos, por intereses familiares, cuestiones de herencia o de otra índole, sufren presiones psicológicas y en muchos casos se les obliga a salir de la familia a la que pertenecen.
En el marco de la celebración del Día del Abuelo, que tuvo lugar ayer, dijo que atienden a 120 personas en el club de las personas adultas mayores, muchas de ellas llegaron faltos de amor, ahí se les proporciona lo que necesitan para que logren la estabilidad emocional.
Destacó que reciben terapias, conviven con otros seres de su edad y participan en talleres, con lo que recobran la esperanza de vida.
Hizo notar que todos los días enfrentan maltrato en la calle, cuando abordan un autobús y se les niegan los descuentos, los conductores se pasan de largo, además de que falta cultura para cederles el lugar.
“Recibimos abuelitos en condiciones de abandono por parte de sus familiares que no los toman en cuenta, por eso tenemos un trato personalizado con cada uno de ellos”, expresó.
Carlos Guevara
El Buen Tono
Habitan en Mixtla
abuelos centenarios
Mixtla de Altamirano.- A pesar de ser el municipio más pobre del país, también es una tierra de abuelitos centenarios, porque entre sus habitantes hay quienes tienen hasta 115 años de edad, informó la presidenta del DIF Municipal, Isabel Anastacio Hernández.
No obstante, su realidad de pobreza y de amor entre pareja, se mezclan día a día con el abandono de sus familiares ante fenómenos como la migración, lo que los hace morir solos en medio de muchas necesidades, reveló.
Es la historia de María Antonia Quiahua y don José Morales, inseparable pareja que desde los 13 años de edad permanecen juntos.
Ambos sin conocer la comodidad de un par de zapatos, envueltos en un cinturón de pobreza, están llenos de vida por dentro con sus 102 y 95 años de edad, ella, la mayor.
El señor de la casa no escucha y ella no habla español, por lo que comunicarse con el resto de las personas les resulta difícil, pero, su increíble capacidad de vida, sorprende hasta el más joven.
Ayer, autoridades del DIF Municipal y el alcalde, José Jacobo Romero Atlahua celebraron con una misa y un convivio el Día del Abuelo en la región más pobre del país.
En este marco, la Presidenta del organismo admitió que hay muchos abuelitos que carecen de familia porque sus hijos salen a trabajar a otras partes y abandonan a sus padres.
Actualmente, comentó, hay 175 abuelos que reciben el apoyo de pensión alimenticia y otros 75 siguen esperando ayuda de parte del DIF Estatal.
Noé Carrillo
El Buen Tono