Córdoba.- El día de ayer Arnulfo Guerrero León, regidor de la ciudad de Tijuana y coordinador nacional de regidores en su visita a esta ciudad, dijo que es un gran problema tener a personas centroamericanas instaladas en su ciudad, ya que se drogan, escandalizan y por si fuera poco no pueden hacer nada por poner orden, ya que los Derechos Humanos los protegen.
Hasta el pasado jueves por la tarde había 4 mil 735 personas de Centroamérica pertenecientes a la Caravana Migrante, la Administración de Tijuana se está gastando diariamente 500 mil pesos para mantener a este sector, sin contar a los empleados municipales que distraen sus tareas cotidianas para coadyuvarlos, se habla que es un tema federal, por lo que le piden al Gobierno entrante que tome cartas en el asunto.
El Regidor citó las palabras del Presidente Municipal de su ciudad y dijo: “no vamos a gastar nuestro dinero que es para los habitantes de Tijuana, en un tema que es a nivel Nacional e inclusive Internacional, aquí tienen que intervenir otro tipo de apoyos, nosotros no podemos mantener ese tipo de gastos, pues no tenemos presupuesto porque es fin de año”.
Las personas de la Caravana Migrante no pueden ser intervenidas, porque los Derechos Humanos los amparan a tal grado de:
1.- No poder pedirles se identifiquen mediante su credencial, acta de nacimiento o algún otro documento, es decir, si uno dice que se llama Juan Pérez deben actuar de buena fe y respetar el nombre otorgado.
2.- Si alguien está fumando marihuana o consumiendo drogas no lo pueden entregar para que lo deporten a su País, simplemente cumple con una sanción administrativa que consiste en pasar en prisión 72 horas y después de eso sale libre.
3.- Si alguien toma la vía pública tampoco pueden sancionarlo porque los Derechos Humanos están atrás de esa persona.
4.- No pueden revisarlos antes de que entren al albergue si traen o no armas o drogas, porque no lo permiten los Derechos Humanos.
Han habido incidentes, como un hombre mayor de edad quiso abusar sexualmente de una menor con discapacidad y hubo un conato porque estaban consumiendo drogas dentro del albergue, en ambos casos los elementos policiales quisieron sacarlos, pero se amotinaron e impidieron que se castigaran a los responsables.
Hay quejas de los vecinos porque los migrantes se la pasan consumiendo drogas y alcohol y por si fuera poco están afectando la economía local, porque Tijuana es una ciudad en la que constantemente las personas cruzan la frontera para realizar diferentes actividades, incluso hay quienes viven en Tijuana y trabajan en Estados Unidos o viceversa y ellos ya no quieren ir a Tijuana, pues se tardan mucho tiempo en pasar la frontera, lo que afecta de manera directa la economía de aquella zona.
