Nuestro país a lo largo del siglo XX, inició una era posrevolucionaria en la que influyeron tres personajes que ocuparon la presidencia de la República.
Después de que los héroes revolucionarios se mataron entre ellos por el poder, vino al fin la paz en manos del general Calles.
Venustiano Carranza mató a Zapata, el general Obregón mató a Carranza y a Villa, Calles mató a Obregón y después de eso se dedicó a gobernar poniendo en la silla presidencial a dos peleles, al tercero, Lázaro Cárdenas.
Aquellos días el pueblo como siempre ante la impotencia de detener esos sucesos anormales, usaba el humor como escape.
En una de las paredes del Palacio alguien escribió un letrero que decía:
AQUÍ VIVE EL PRESIDENTE, EL QUE MANDA VIVE ENFRENTE.
Todo era tranquilidad, hasta que Cárdenas una vez en el poder, se valió de Lombardo Toledano y de Fidel Velázquez. Estos dos tenían tendencias socialistas lo que les sirvió al Presidente en turno, para iniciar el sindicalismo agresivo que tanto daño a la economía, pero que le sirvió al presidente, para enfrentar el ejército de Calles y a aprehenderlo y sacarlo del país.
Calles no se atrevió a disparar contra el pueblo. Prefirió irse de México.
Lamentablemente estos sindicatos fueron manejados por Fidel Velázquez para iniciar un partido político que a través de ochenta años y varios cambios de nombre, aparece finalmente como PRI.
El plan era, no soltar el poder a ninguna otra fuerza que no fuera la revolucionaria que así le llamaron por bastantes años.
Le llamaban en otros países “La dictadura perfecta” pues el presidente que entregaba el poder, previamente había decidido a quien se lo iba a dejar.
También hubo tres presidentes muy buenos que lamentablemente no se han podido repetir: Don Adolfo Ruiz Cortines, Don Adolfo López Mateos y Gustavo Díaz Ordaz. Fue la mejor época de este siglo para México. Existía una ley que se llamaba DISOLUCION SOCIAL, con la cual podía detenerse a los causantes de delinquir en contra de la sociedad.
El drama para México vino cuando apareció Echeverría ex secretario de gobernación de Díaz Ordaz, que según dicen era empleado de la CIA americana, cuando apareció un movimiento estudiantil parecido al actual, recibió órdenes de nuestros vecinos de sofocar ese movimiento a como diera lugar, ya que se descubrió que detrás de ese movimiento estaba Rusia a través de Fidel Castro en Cuba, que en ese tiempo contaba con todo el apoyo del comunismo.
Este fue el famoso movimiento del 68 y la masacre del 10 de junio del 71.
En ese entonces existían a partir de 1970, un número creciente de empresas paraestatales que sirvieron para que la Presidencia de la República adquiriera más poder. 1,200 aproximadamente.
Dice un dicho que un país que no toma en cuenta su pasado, corre el riesgo de repetirlo. Y es lo que nos está pasando.
Por alguna razón que desconozco son los estados de Guerrero y Michoacán, los que están generando la violencia actual.
Indudablemente alguien o alguienes están detrás de este movimiento, “disque de alumnos y profesores”, sin embargo en las tomas de la televisión se nota que de maestros no tienen nada, y de estudiantes solo las normales de maestros son las que contagiados por otras tendencias, tradicionalmente se cuelgan de cualquier pretexto para dejar de estudiar y declararse en huelga.
La ley en el sector privado autoriza al patrón a suspender los salarios mientras dura la huelga, y si la gana el sector obrero reciben sus salarios caídos.
Pero si la huelga no es legítima, entonces el patrón no está obligado a pagar dichos salarios.
En mi humilde opinión podría la Cámara de Diputados, hacer alguna modificación similar para el apartado B, que le diera más defensa al Gobierno federal. Esto si no les da miedo ya que según parece, todo mundo le está sacando el bulto al problema.
Un incendio no apagado a tiempo, puede acabar con una ciudad y hasta con un país.
Dicen, no sé si sea cierto, que a los anteriores cabecillas del movimiento del 68, los amarraban de pies y manos y eran arrojados desde un avión a las aguas del Golfo de México. Me parece muy cruel pero ese rumor corría entre la población.