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HERMOSILLO, Son.— Los 72 municipios de Sonora se encuentran en una situación de sequía extrema o peor, marcando la peor crisis hídrica en la historia del estado, según el último informe del Sistema Meteorológico Nacional (SMN). A una semana del Día Mundial del Agua, la escasez ya impacta severamente a las presas, la agricultura y la vida cotidiana de los habitantes, mientras que las estrategias gubernamentales reciben duras críticas.
Presas al límite y cultivos en riesgo
Las nueve principales presas de Sonora se encuentran apenas al 13.46% de su capacidad, un nivel crítico que agrava la crisis. En 2023, su almacenamiento era del 47.6%, lo que muestra una alarmante reducción. La escasez de agua ha golpeado con fuerza la producción agrícola, particularmente en el Valle del Yaqui, donde el cultivo de trigo se ha desplomado un 79%.
Mientras el gobierno estatal promueve alternativas como reducir los riegos en la producción agrícola y la reconversión de cultivos hacia opciones menos demandantes de agua, los productores enfrentan un panorama incierto.
Plan Hídrico Sonora: críticas y protestas
Ante la crisis, el gobernador Alfonso Durazo Montaño anunció en febrero el Plan Hídrico Sonora: Agua para Todos, que contempla la construcción de tres presas y sus acueductos con una inversión de 7,488 millones de pesos. Sin embargo, ambientalistas y académicos cuestionan la medida, argumentando que “las presas no generan agua” y que el proyecto podría traer impactos negativos en la cuenca del Río Sonora.
Las protestas no se hicieron esperar. Un colectivo de pobladores, científicos y activistas exigió diálogo con el gobierno, pero la falta de respuestas y compromisos incumplidos avivó el descontento. A pesar de esto, el 12 de marzo, el gobierno federal anunció que la licitación del proyecto iniciará en junio y la obra arrancará en julio con una inversión inicial de 500 millones de pesos.
Fugas y mala gestión agravan la crisis
Más allá de la sequía, la gestión del agua en Sonora también es señalada como deficiente. En Hermosillo, la organización civil Hermosillo ¿Cómo Vamos? reveló que sólo se factura el 43% del agua suministrada, mientras que las fugas en la red de distribución representan una pérdida significativa.
Especialistas advierten que, sin corregir este problema, cualquier megaproyecto, incluidas las presas, será un gasto millonario sin una solución real para la crisis hídrica. Mientras tanto, la sequía sigue avanzando y dejando a miles de sonorenses sin acceso al agua.
