Son 3 mil docentes que no se evaluaron

Córdoba.- La sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), asegura no solapará a los más de 3 mil docentes que no justifiquen su inasistencia a la primera evaluación del servicio profesional docente.

 

En entrevista el secretario general del SNTE sección 32, Lázaro Medina Barragán  aseguró que en el tema de la Reforma Educativa una de las principales demandas es la necesidad por la salvaguarda de los derechos de los trabajadores.

 

“De ninguna manera se va a solapar a los catedráticos que aun cuando fueron notificados para presentarse a la evaluación del pasado mes de noviembre, estos incumplieron, principalmente porque se trata de una normatividad que los docentes tienen que asumir” dijo.

 

Según explicó de los 92 mil agremiados a la base sindical, cerca del 10 por ciento fueron notificados para el examen, sin embargo sólo se presentaron cerca de 6 mil para la evaluación, mismos que tendrán que justificar dicha inasistencia para la reprogramación del examen.

 

“Hay una normatividad que señala que quienes no justifiquen su falta serán sancionados. Estamos en un México que requiere de perfiles nuevos de los educandos para que interactúen en un mundo globalizado”, sostuvo el dirigente magisterial.

 

En este sentido aseguró  que el equipo político de la sección 32 no ha recibido ninguna denuncia por parte de docentes que aseguran haber sido afectados durante las protestas que se presentaron en la capital del Estado, esto a pesar de las denuncias que hicieron integrantes del Movimiento Magisterial Popular Veracruzano (MMPV).

 

Se mantiene adeudo

 

Aunque para el cierre del 2015, Medina aseguró se han cubierto en la totalidad los pagos de aguinaldos, bonos y prestaciones salariales, el Gobierno del Estado aún mantiene el retraso por pago de bono a jubilados y retroactivos en carrera magisterial categoría 22 y 23. 

 

     La esperanza es que dicho atraso se solvente antes de que concluya este año, ya que hasta el momento se han cubierto el resto de la deuda millonaria que en su momento se demandó al Gobierno y hasta la fecha se sigue en la espera de que solvente el pago.