Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín.- La gestión del presidente municipal de Fortín, Gerardo Rosales Victoria, nuevamente queda en entredicho tras el evidente deterioro de la infraestructura vial en puntos críticos del municipio, como el bulevar Córdoba-Fortín, a la altura del fraccionamiento Shangri-La, donde un socavón de gran magnitud ha expuesto la falta de mantenimiento y la indiferencia de su administración.
Lejos de atender con seriedad y eficacia el problema, el alcalde, en compañía de su cabildo y el titular de Obras Públicas, Enrique Gaspar Falcón, la tarde del martes acudieron al lugar únicamente para simular interés y aparentar trabajo. La “solución” ofrecida por el gobierno municipal fue colocar dos llantas y un par de barreras prestadas por Tránsito Estatal para acordonar la zona, acción que provocó burlas y críticas entre los fortinenses, quienes señalaron la falta de preparación y seriedad de las autoridades.
A esta negligencia se suma otro problema ignorado por el ayuntamiento: las coladeras rotas y llenas de basura en esa misma área, que durante las lluvias recientes han provocado inundaciones constantes, afectando a automovilistas, peatones y viviendas cercanas. Estas situaciones, lejos de ser atendidas, permanecen olvidadas por un gobierno que ha demostrado ser más reactivo que preventivo, dejando al municipio en el abandono.