Roma.- En un encuentro con los medios, el médico Alberto Zangrillo, del hospital San Raffaele de Milán, dijo que el paciente se ha recuperado, está alerta, orientado en el tiempo y espacio, dialoga con sus padres y recuerda su vida hasta antes del accidente, ocurrido el pasado 24 de abril.
Ese día el menor, identificado como Michael, de 14 años, quedó atrapado bajo las aguas de un río en la norteña localidad de Castelletto di Cugino, al que se lanzó con un grupo de amigos.
Un pie del adolescente quedó atorado en el fondo del río, a dos metros de profundidad, sin que sus amigos lograran liberarlo. Fueron los bomberos los que pudieron sacarlo luego de que durante 43 minutos permaneció bajo el agua.
Se trató de un tiempo eterno durante el cual su corazón dejó de latir. De hecho, cuando fue llevado a la superficie lo daban por muerto, pero los socorristas no se rindieron y tras lograr que el corazón volviera a funcionar lo llevaron en helicóptero al hospital San Raffaele de Milán, donde el equipo médico hizo todo lo posible para salvarlo.
“Es la más grande satisfacción de toda mi carrera profesional”, declaró Zangrillo, responsable del equipo médico que lo atendió.