AGENCIA
Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- Casa Vegas se ha convertido en una decepción para ciudadanos y turistas al terminar en un desolador panorama, que pasó de ser centro turístico a un tianguis dedicado a la ropa de segunda mano. El intento de “mercadillo” se pudo ver vacío y sin ventas, según testimonios de comerciantes desencantados.
A pesar de las repetitivas invitaciones de las autoridades de comercio para ocupar espacios en las entradas del lugar, los comerciantes afirmaron no vender absolutamente nada. El horario extendido, de 08:00 a 17:00 horas, no logró atraer a visitantes, ni muchos clientes. Los comerciantes se retiran a mediodía debido a las escasas oportunidades y las dificultades de transporte.
Incluso el grupo de comerciantes del mercado Cerritos que normalmente venden ropa usada, tuvieron que gastar por el servicio de sanitarios. Este escenario contrasta drásticamente con las promesas de campaña que situaban a Casavegas como un detonante para generar empleo formal y bien remunerado en la zona, una expectativa que claramente no se ha cumplido terminando ahora en ventas de ropa de uso.
A pesar del evidente desinterés turístico y el escaso flujo de visitantes, las autoridades municipales continúan destinando recursos para publicitar el proyecto. Llama la atención que se emitan constantemente promocionales de Casavegas, mientras lugares como el Mercado de Artesanías quedan en el olvido y sin la misma atención publicitaria, siendo los artesanos y orizabeños quienes le han dado vida y validez a la denominación de Pueblo Mágico.
Este desbalance revela una gestión cuestionable y una falta de priorización en la inversión pública señalan artesanos y comerciantes.
Con alrededor de 30 vendedores afectados por la falta de actividad, el proyecto se erige como un ejemplo de oportunidades desperdiciadas y decisiones criticables, cuestionaron los emprendedores.