Nogales.- La contaminación por el derrame de lixiviados que provoca el Relleno Sanitario Regional de las Altas Montañas sigue sin ser atendido por las autoridades correspondientes y con la actual temporada de calor los riesgos sanitarios son mayores para los más de 2 mil habitantes que viven en la periferia del lugar.
Se trata de pobladores de las colonias Las Maravillas, El Cerrito, La Nueva Jerusalén, Los Arenales y Lázaro Cárdenas, quienes están expuestos a contraer diversas infecciones gastrointestinales y dermatológicas contraídas por las bacterias, bacilos y hongos que contienen los líquidos de la basura que al evaporarse respiran.
Vecinos de la colonia Lázaro Cárdenas se quejaron de que los últimos presidentes municipales no han hecho nada al respecto, pese a que la contaminación se agrava en el manantial El Ojito de Agua, de donde se abastece la mayoría de los pobladores de El Encinar.
“Aquí todavía estamos quienes nos dedicamos a la siembra de maíz, frijol, cebada y sorgo para autoconsumo y venta en la región, criamos animales que por ingerir agua del río contaminada por los jugos de la basura se nos han muerto, el relleno es un problema de años, pero no hay solución”, expresó un habitante.
Recordaron que a pesar de que en junio del año pasado bloquearon las instalaciones para exigir la intervención de las dependencias ambientales y del Ayuntamiento, y aunque lograron una inspección en el lugar por parte de la Secretaría del Medio Ambiente en el Estado, el caso no trascendió, porque se mantiene igual.
