*A una semana se desconoce el estatus del oficial detenido por la Guardia Nacional
*Alcalde de Fortín sigue sin dar la cara
Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín.- A una semana del atropellamiento de una mujer de 66 años originaria de Tetelcingo, Coscomatepec, a manos de un elemento de la Policía Estatal, el silencio de las autoridades municipales es evidente. La víctima sigue en estado desconocido y el policía involucrado, tras ser detenido por la Guardia Nacional y trasladado al C5, podría haber sido liberado sin mayor consecuencia. Esta omisión es una muestra más de la corrupción de Gerardo Rosales Victoria para asumir su responsabilidad como presidente municipal.
Mientras la ciudadanía exige respuestas, el alcalde está más ocupado protegiendo a los ambulantes foráneos que han tomado las calles y banquetas de Córdoba. Vendedores provenientes de Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y el Estado de México han convertido la vía pública en un mercado descontrolado, afectando el tránsito peatonal y la imagen urbana. Pero Rosales Victoria prefiere hacer caso omiso, ya que recibe su respectiva tajada por permitir esta ilegalidad.
Junto a él, Ernesto Arteaga Quevedo, director de Desarrollo Económico, opera con la misma impunidad. No solo facilita la invasión de comerciantes sin regulación, sino que además alardea dentro del Palacio Municipal de que su futuro está asegurado en la próxima administración de Eduardo Alonso García Viveros en caso de ganar las elecciones. Ante esa situación algunos empleados señalan que ese descaro refleja el verdadero interés de varios servidores públicos de la actual administración: enriquecerse a costa del desorden y la corrupción.
