Honestamente ¿les sorprende que EU y Canadá no quieran hacer negocios con nosotros?
Pero si somos el país más corrupto del mundo.
Donde viven los políticos más ignorantes, con menos estudios, que menos trabajan y que más ganan.
Un país donde no se les exige ni la primaria para cambiar, “hacer y deshacer leyes”.
Somos el país donde los estudiantes desaparecen y los narcos se pasean a la luz del día.
Donde el que cumple las reglas es el estúpido.
Donde el que paga impuestos es el imbécil y el que se roba la luz, el cable y todo lo que puede es un héroe.
Somos el país donde el que trabaja de manera honrada no gana ni para comer y el ladrón tiene todos los lujos.
Donde los buenos ciudadanos viven muertos de miedo y los corruptos libres y en las calles.
Donde los servidores públicos hacen todo menos servir.
Donde el presidente no ha leído ni tres libros, pero sabe hacer negocios con sus amistades y paga todos los favores por adelantado.
Donde las mujeres son violadas y asesinadas, los culpables lo confiesan y obtienen amparos, pueden salir del país y viven libres de vacaciones.
Donde los sindicatos tienen líderes millonarios y trabajadores muertos de hambre.
Donde se apuntan millones de colados a unos 15 años y les da flojera ir a una marcha para exigir sus derechos.
Donde los gobernadores se hacen multimillonarios, a nadie le extraña, nadie pide cuentas y todavía quieren regresar por más ¡y los dejan!
Somos un país donde casualmente se capturan a los más buscados cuando el changarro se les está cayendo en pedazos.
Donde los diputados no saben ni cuántos artículos tiene la Constitución, el país que menos lee.
Donde los maestros tienen que ir contra el sistema y los sistemas de salud pública no tienen ni insumos ni medicinas.
Donde los niños son obesos y los adultos mayores están desnutridos y solos, donde se manipula la salud, la economía, la política, la educación…
Somos el país con más feminicidios, con más homicidios, con más secuestros, con más reporteros desaparecidos, con más fosas clandestinas, con más impunidad.
¿de verdad les sorprende?
Si tuvieran un vecino así, estoy seguro que cerrarían sus propias puertas y ventanas, levantarían muros, pondrían rejas, alarmas, guardias, perros y si se pudiera se cambiarían de casa, pero en este caso es imposible.
Ya es hora de aceptar que Trump sí está muy loco, pero nosotros no somos ninguna monedita de oro, así que, a cambiar las cosas para hacer de nuestro país lo que debe ser y desde hace mucho.
PD. Amo mi país, su cultura, sus tradiciones, valoro su talento y sé que somos unos buenos, pero no es suficiente.
“Despertemos al cambio, empezando por nosotros mismos” y por nuestros niños, pongámosle el ejemplo a nuestros niños de todo México, ellos son el futuro de este bello País” rescatemos los valores, y creamos en nosotros mismos”, ¡luchemos por un cambio digno!
Ya no tengas miedo al cambio en México.
Sí, se puede.
