La conferencia matutina encabezada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se centró en temas polémicos que han generado inquietud en la opinión pública. Acompañado por ex funcionarios gubernamentales y líderes políticos, López Obrador se pronunció sobre los señalamientos que vinculan a Omar García Harfuch con el narcotraficante Genaro García Luna, así como sobre el proceso de selección de candidatos para las elecciones locales en la Ciudad de México.
Las declaraciones del presidente, en las que pide que se presenten denuncias si García Harfuch es ‘culpable’, han generado cuestionamientos sobre la transparencia y la rendición de cuentas en el gobierno. La falta de una postura firme y acciones concretas para abordar las acusaciones plantea dudas sobre la capacidad del gobierno para investigar y garantizar la justicia en casos de alto perfil.
La sugerencia de que la decisión de tener a García Harfuch como candidato de Morena en la Ciudad de México sea determinada por el pueblo es un recordatorio de la necesidad de procesos electorales justos y transparentes. Sin embargo, esta declaración también ha suscitado interrogantes sobre la independencia del gobierno y su papel en el proceso electoral.
