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Semana Santa en vivo

Superiberia

Es mitad de Semana Santa y a diferencia de otros años, hay un contexto climático más que inusual. En pleno abril no terminan los frentes fríos y ayer azotó uno, el número 50, que ocasionó vientos del norte con rachas superiores a los 100 kilómetros por hora en la costa y derribó lo que pudo. Por el fenómeno hay una víctima, un adolescente de 16 años originario de Coscomatepec que se dedicaba a la venta de dulces en el puerto de Veracruz y que falleció aplastado por un anuncio publicitario que se desplomó.

 En la región montañosa hubo descenso de temperatura y lluvia como estuviera todavía la temporada invernal. Sin duda, es parte de la factura ecológica que se está pagando por la agresión a la naturaleza –la quema combustibles fósiles, la tala los bosques, el exterminio de especies, la contaminación de los mares y la sobreexplotación de la tierra-. Ahora sí, como dice aquel refrán de connotación religiosa: el hombre en el pecado lleva la penitencia.

 Y hablando de los días santos, en el municipio de Tomatlán -al que se llega sobre la carretera federal Fortín-Huatusco y también por la ruta alterna Córdoba- Ixhuatlán del Café -se realizará a partir de mañana jueves el teatro popular denominado “Semana Santa en Vivo” que es la representación de las últimas horas en la vida de Jesús, desde que lo capturan al estar orando en el Huerto de los Olivos hasta su recorrido rumbo al monte Gólgota para ser crucificado. 

 La “Semana Santa en Vivo” es una tradición de varias décadas en Tomaltlán y en ella participan los lugareños que desde meses atrás se preparan en la actuación para encarnar los papeles de aquellos que vivieron alrededor del Cristo, tanto sus discípulos como el rey Herodes y su corte, el procurador romano Poncio Pilatos y los disciplines sacerdotes judíos que se confabularon con los dos primeros para armar un juicio espurio al profeta y llevarlo al suplicio. 

 Jesús será representado por Ernesto Hernández Luna, María, la madre, por Shalom Prado Cárdenas, San Juan Evangelista por Beker Usiel Fitta Galán, apóstol Simón Pedro por Román Fitta Hernández –uno de los impulsores del proyecto-, los sumos sacerdotes Anás y Caifás por Bernardo Juárez y Alfonso Bretón, respectivamente, mientras que Poncio Pilatos será encarnado por Alejandro Vega y su esposa Claudia por Claudia Fitta. En tanto, el rey Herodes será representando por Jacinto Pérez, a Herodias por Elisa Juárez, el rebelde zelota Barrabás por Yahir Bañuelos y el soldado romano Malco –el que encargado de apresar a Jesús y a quien Pedro le corta la oreja- por Marcial Bañuelos.

 Los escenarios son los propios del pueblo: la plaza principal, las calles donde se realiza el viacrucis y la colina donde se ubica el cementerio, en la cual finaliza la representación con la muerte de Cristo. El teatro popular en Tomatlán es una muestra artística que sobrevive gracias al esfuerzo de las personas de buena voluntad que lo organizan y lo han conservado durante muchos años pese al escaso el apoyo oficial. Aún así han logrado catapultar al proyecto como uno de los atractivos turísticos de la región Centro.

 Vale la pena apoyar el esfuerzo ciudadano para mantener la tradición histriónica y la invitación está abierta a todos los que quieran apreciarla para que acudan mañana jueves a partir de las 8 de la noche y el viernes desde las 12 del día. Paralelo a la muestra teatral también podrán acudir –los que sean creyentes practicantes- a las ceremonias religiosas de la parroquia de San Miguel Arcángel. La presencia del público –principalmente de los visitantes – motiva a los organizadores y ayuda a la economía local.

 

SANTA DESMEMORIA

 Vaya que el tiempo gira en espiral como dice el escritor Gabriel García Márquez en su obra maestra “Cien Años de Soledad” pues todo lo que se va siempre regresa. En política también aplica y el tema viene al caso porque en el año 2006 cuando sucedió el accidente carretero en las Cumbres de Maltrata que ocasionó la muerte de 57 jóvenes feligreses –citado en el texto anterior- había dos personajes sobre los que pesaron denuncias penales que siguen impunemente viviendo de la nómina pública. Ellos son Guillermo Knight Bonifacio quien en ese entonces era subsecretario de Comunicaciones de Veracruz (Secomver) y Carlos Contreras Plata, subdelegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT) en la región de Orizaba.

 Los dos fueron denunciados porque las rampas de emergencia para vehículos con problemas de frenado estaban mal señalizadas y ese habría sido una de las principales causas de que el autobús donde viajaban los peregrinos tabasqueños cayera en un barranco.

Al parecer el conductor siguió los señalamientos erróneos que había sobre la autopista y en lugar de lograr detener la unidad en una rampa segura se dirigió al vacío y ocasionó la muerte de la mayoría de los pasajeros. En aquellos tiempos corrieron ríos de tinta sobre la responsabilidad de esos funcionarios pero la querella nunca condujo al deslinde de culpas.

 A ocho años de distancia los dos siguen viviendo del erario como si nada hubiera pasado y aún más, uno de ellos, Knight Bonifacio es el delegado de la SCT en la entidad, es decir, tiene injerencia en el asunto del accidente ocurrido el domingo pasado en el sur del estado y en el cual perecieron 35 personas también originarias de Tabasco pues la autopista está a cargo de la dependencia federal. A Guillermo Knight lo conocen en el mundillo de la política local como “El Caballero” y es uno de los personajes con más señalamientos de corrupción desde que estaba en el gobierno estatal.

 Este señor mucho tiene por qué responder por las obras mal hechas y el desfalco provocado por empresas constructoras que reportaron obras fantasmas y cobraron millonadas por contratos incumplidos porque como subsecretario de Comunicaciones fue parte del entramado para que se entregaran esos contratos y no se supervisara la entrega de las obras. Aún así, recientemente lo nombraron delegado de SCT, lo que confirma la tesis ya citada de que en el duartismo no se castiga a los corruptos, al contrario, se les premia.

 En tanto Carlos Contreras Plata pese a sus antecedentes y la denuncia penal por el accidente del 2006, lo acaban de nombrar nuevamente como subdelegado de la SCT en Orizaba –gracias al “palancazo” de su compadre “El Caballero”- y ahí sigue, conectado a la nómina pública. A Contreras Plata se le ha acusado de todo y sin medida. Vaya, su prepotencia llega a tal grado que hace un par de años fue denunciado por golpear salvajemente a un niño de 12 años en una fiesta infantil solo porque el pequeño le reclamó a su hijo algo relativo al pastel. No hubo autoridad que castigara tal abuso. Así, la santa desmemoria hace que en Veracruz los corruptos y cuestionados regresen a cargos públicos como si no debieran nada.

 

LA REAL NACADEMIA

 Tienen razón aquellos que lanzan piropos a la administración estatal aduciendo que se viven “nuevos tiempos” en Veracruz. Es más, tan nuevos son que ya se está escribiendo un nuevo compendio de términos para diferentes asuntos que incomodan al despachante de Palacio de Gobierno y a sus colaboradores. Es la nueva semántica del duartismo para nombrar a los acontecimientos y personas, y seguramente en breve la Editora de Gobierno publicará el primer ejemplar del Diccionario de la Real Nacademía de Prosperilandia, la tierra del nunca jamás.

 Ya se tiene un adelanto de las nuevas definiciones que se incluirán en ese compendio que han sido mencionadas por el mismo gobernante en turno. Por ejemplo, a las extorsiones que sufren los veracruzanos todos los días y ahora se les llamará “engaños telefónicos” , es decir, los amagos de muerte a cambio de entregar dinero a los malhechores son equiparables a las estafas por la venta de artículos que no cumplen con las especificaciones o las oferta incumplidas al abonarse a la televisión por cable. Los ciudadanos que caigan en la trampa será bajo su responsabilidad por creerse tales “engaños”, no los que emitieron los emitieron. La vida es bella, ¿no creen?

También se modificará las definiciones relativas a los secuestros pues estos “no son actividades redituables en Veracruz”. El plagiar a la gente será una actividad lucrativa en otras partes del país pero no en la entidad y ahora los maleantes que están en territorio estatal se morirán de hambre si se dedican a secuestrar a la gente porque no les reditúa ganancias –según la óptica del mandatario-, y seguramente no tendrán otra opción que irse del estado o en su caso dedicarse a vender rebanadas de piña con chile o hacer tandas para ganarse la vida ante el desplome de sus ingresos. ¡Qué definición tan sesuda e incuestionable!.

Asimismo, el gobernante afirma que las balaceras en la vía pública –como las últimas sucedidas en el puerto de Veracruz y Xalapa- no son tal y deben llamarse: “acciones de las instituciones”. Las balaceras, dice, tampoco asustan a los turistas ni a los lugareños, al contrario ambos se sienten seguros y contentos porque frente a ellos se líen a balazos los malosos contra los gendarmes, sin importar que queden en medio y se conviertan en daños colaterales. Y cuando los índices de delictivos vayan en ascenso, el nuevo diccionario duartista ordenará que se interprete a la inversa. Es la versión semiológica del “aquí no pasa nada”.

 El secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez ha aportado su contribución al nuevo Diccionario de la Real Nacademía de Prosperilandia y ahora a los “desaparecidos” se les llamará “delincuentes”, la versión actualizada de lo que hace tiempo dijo el subprocurador en la región de Xalapa, Marco Antonio Lezama Moo cuando aseguró que las jóvenes desaparecidas “se van con el novio o el amante”. Entonces en el diccionario duartista se podrá localizar la palabra “Desaparecido” como “delincuente o mujer fugada con sus pareja sentimental”.

 Como son días de recogimiento espiritual no se pueden lanzar anatemas contra esos fariseos duartistas que trastocan la realidad y hasta las definiciones de las palabras, y solo queda alzar la mirada al cielo y exclamar con los brazos abiertos: ¡Señor perdónalos porque no saben lo que hacen! (Y en efecto, no saben gobernar ni hacer el trabajo por el cual se les paga). Consummatum est.

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