Córdoba.- El señor Enrique Alvarado, líder de la Unión de Tablajeros en el mercado Revolución, dijo en entrevista para el periódico El Buen Tono que, debido a que los centros comerciales ofrecen pierna de cerdo ya preparada, las familias cordobesas y más las jóvenes ya no cocinan la cena de Navidad, sino que la prefieren comprar en otros lugares a pesar de todos los conservadores que les aplican. Los tablajeros llevan tres años en esta situación y a la fecha han perdido hasta un 20% de sus ventas, incluso no sólo ellos, sino todos los locatarios del mercado, aunque sí se ha observado movimiento de personas caminando entre los pasillos, no es nada comparado con años anteriores, cuando no se podía ni caminar en estas fechas.
Respecto a las piernas ya preparadas que ofrecen los centros comerciales, el líder de tablajeros piensa que en estos lugares ofrecen piernas bien decoradas, hasta con rodajas de piña y naranja para que a la gente se les antoje; sin embargo, en muchas ocasiones no tienen el sabor esperado, están crudas o incluso hasta daño les llega a hacer por el tiempo que permanecieron refrigeradas.
Esa tradición es la que se conservaba en las familias completas, en donde cocinaban para la hora de la cena y es que no sólo era eso (cocinar), era platicar de todo lo acontecido en el año, contar anécdotas que sacaran carcajadas de todos los presentes, ver a los primos para jugar, en fin, comenzar la fiesta desde temprano para acabar todos sentados en la mesa y degustar los sagrados alimentos. Hoy en día difícilmente se observará a familias como las antes mencionadas, si bien les va llegarán minutos antes de la cena con los alimentos que compraron ya preparados, eso sí, muchos disfrutarán la noche hasta amanecer, pero se habrán perdido la mitad del proceso.
La diferencia entre comprar en el mercado o comprar en los centros comerciales, es que en estos últimos días las piernas pueden tener semanas de haber estado refrigeradas, es por eso que en el mercado Revolución se puede ver lo que están despachando; el líder de tablajeros invita a hacer un experimento: “Agarren alguna carne, de la que sea y hagan sus compras y sus actividades, en dos horas checan lo que compraron, a ver qué color tiene e incluso en ocasiones hasta cómo huele”.
