Orizaba.- Aterrado, pero tomando valor, “Miguel Ángel”, de cinco años, protegió a su hermana “Fanny”, de dos, y juntos se refugiaron debajo de la cama de su humilde vivienda en la colonia Juárez, cuando se quemaba. tras un incendio, que posiblemente fue provocado, mientras su mamá asistía a una junta escolar. Afortunadamente salvaron la vida.
“Los nenes se asomaban por la puerta y pedían ayuda a gritos. El niño decía que lo ayudaran, que su casa se estaba quemando”, dijeron vecinos del lugar, quienes aseguran que la omisión de cuidado pudo haber cobrado la vida de los pequeños.
Según dicen los residentes de la calle 16 de Septiembre, entre Venustiano Carranza y Primero de Mayo, la señora Lidia Cuatra Juárez, junto con sus cinco hijos menores de edad y uno mayor, habitan la casa marcada con el número 53.
Ayer Lidia salió del cuarto que le renta a María Celia Martínez, pues tenía que ir a la escuela de uno de sus hijos a atender una junta obligatoria. Aparentemente a la mujer se le hizo fácil dejar a “Miguel Ángel” de 5 años, cuidando a “Fanny”, de 2.
Después de casi dos horas solos en el pequeño cuarto, a las 10:20 de la mañana una vecina se percató que de la vivienda salía una gran cantidad de humo, por lo que le gritaron a María Celia para que abriera la casa y salvara a los niños.
Una puerta de madera de ese inmueble se estaba quemando, por lo que de inmediato fueron movilizados los bomberos de Orizaba, así como personal de Protección Civil, los cuales sin pérdida de tiempo sofocaron el incendio.
El fuego alcanzó las tablas, un bote de plástico y una lona, pero afortunadamente no hubo personas quemadas o intoxicadas. María Celia, de 82 años, fue atendida por los paramédicos, al sufrir una crisis nerviosa.
Algunos vecinos aseveraron que los niños pudieron haber provocado el incendio, pero como un juego, mientras otros aseguraron que la causante de este siniestro fue la propietaria de esos cuartos, María Celia Martínez, la cual por su avanzada edad ha causado algunos incidentes similares.
Por fortuna, “Miguel Ángel” y “Fanny” fueron encontrados debajo de su cama y salvados por las corporaciones de rescate, las cuales solicitaron la presencia de las autoridades del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), para verificar la posible omisión de cuidado.
Aparentemente no es la primera vez que el DIF le ha hecho observaciones a Lidia Cuatra sobre el cuidado de sus hijos, las condiciones en que los tiene y por los peligros que existen en el reducido cuarto que renta, por lo que la mujer fue citada para dialogar sobre la sanción que pudiera existir en su contra.
GUILLERMO RAMOS T.
EL BUEN TONO
