Orizaba.- A las 13:30 horas de este miércoles fue presentado a declarar en el Juzgado Tercero de Primera Instancia, el segundo comandante Adán González Vega, por el crimen del alcalde de Aquila, Gerónimo Manuel García Rosas, luego de ser consignado por el Ministerio Público.
Resguardado por elementos de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social (DGPRS), así como por gendarmes del estado, el ex jefe policiaco compareció al integrársele el expediente 70/2013 del citado Tribunal de Justicia.
Asesorado por su abogado defensor, el presunto asesino escuchó la lectura de su declaración ministerial, en la cual describe paso a paso los hechos ocurridos el 21 de julio después de las 00, hasta el momento del asesinato.
Adán dice que llegó al convivio en donde estaba el alcalde Gerónimo Manuel porque fue invitado por los padres del menor festejado.
Reconoce que se tomó 10 cervezas, tequila y al calor del alcohol señala que le reclamó al Alcalde la falta de pago de dos quincenas.
En su misma declaración, Adán dice que el finado les comentó que él les pagaría cuando quisiera, por lo que al igual que sus elementos, se molestaron.
Sin más le disparó con la pistola revólver calibre .38, dos ocasiones en el pecho, por lo que el edil cayó malherido.
Los gendarmes que acompañaban al jefe policiaco se fueron del lugar, en tanto que él corrió por un barranco, pero fue capturado por los testigos del asesinato.
La tarde de ayer, lejos de reconocer la declaración, el ex jefe policiaco se retractó.
Señaló que no fueron los hechos así y se negó a firmar de conformidad, dando otra versión, en la cual niega las imputaciones.
Luego pidió a abogado defensor duplicar el tiempo del término constitucional, a fin de que se le corra y pueda aportar pruebas de su inocencia en el expediente.
Mientras Adán debe de permanecer encarcelado en los separos de La Tomita, al no alcanzar su libertad bajo fianza, y en el transcurso de la semana se determinará si es o no responsable de los delitos de homicidio, abuso de autoridad e incumplimiento de un deber legal.
Gabriel Lagos
El Buen Tono