CÓRDOBA.- Casi 24 horas después de la detención de Alejandro Castro Alfonso, quien también se hacía llamar Pascual Sandoval Ortiz, El Picoreta, uno de los principales líderes del Cártel de Los Zetas que operaba en la zona de Orizaba, la narcoviolencia se agudizó en esta región.
Entre el viernes y sábado, el número de ejecuciones relacionadas con el crimen organizado, llegó a 10, nueve de ellos ocurridos viernes.
De los 10 cuerpos hallados durante las últimas horas, nueve de ellos fueron asesinados con saña, al ser degollados y decapitados, además, junto a los cuerpos yacía un narcomensaje; uno más fue ejecutado de cinco balazos y su cadáver dejado abandonado sobre un camino, en el municipio de Omealca. Ayer, a través de las redes sociales circuló un mensaje en el que un grupo criminal advertía que vengaría la detención de El Picoreta, a quien las autoridades responsabilizan de la ola de violencia ocurrida en esta zona en este año.
Por otro lado, los ocho hombres degollados encontrados el viernes en el municipio de Cosolapa, Oaxaca, fueron identificados por sus familiares.
Los jóvenes eran oriundos de la región de Orizaba y presumiblemente habían sido levantados por hombres armados, vestidos con uniformes policiacos, el pasado 18 de noviembre.
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