Cuitláhuac.- Automovilistas que transitan por el camino El Polvorón, se quejaron ayer de las emanaciones fétidas y residuos sólidos, del basurero de Atoyac, que invaden la carretera y atraen gran cantidad de aves de rapiña.
El tiradero a cielo abierto recibe decenas de toneladas de basura diariamente, pero debido a la saturación de desechos, los camiones ya no pueden entrar hasta el centro del basurero y descargan en las orillas.
Esta situación ha ocasionado que gran parte de la basura se disperse hacia el camino, donde hay derrame de líquidos lixiviados, que ocasionan mal olor, así como la proliferación de zopilotes.
Conductores de vehículos, señalaron su malestar por esta situación.
Junto al camino, 6 integrantes de una familia de pepenadores, que viven se lo que recogen, ayer permanecían observando las maniobras de una máquina retroexcacadora, que llegó al lugar para remover los desechos sólidos y abrir paso para los camiones recolectores.
ANTONIO OSORIO
El Buen Tono