Yanga, Ver.- Un taxista de Córdoba, perdió trágicamente la vida, luego de que la unidad que conducía quedará desbaratada del frente y dentro de una cuneta en donde el nivel del agua subió debido a la fuerte lluvia que azotó en la zona centro, por lo que dicha persona perdió el control al momento de desplazarse a exceso de velocidad sobre la carretera federal Córdoba-Cuitláhuac a la altura de la localidad Palmillas.
De acuerdo al reporte de las autoridades Ministeriales se conoció que los hechos se registraron aproximadamente a las 12:20 horas del sábado, cuando Isidro Calvario Ramírez, de 75 años de edad, con domicilio en prolongación de la calle 9 avenida 18 de la colonia Praxedis Guerrero, quién se desempeñaba como taxista y el cual hacia sitio en la Terminal de Autobuses de Córdoba TAC, al conducir el taxi con número económico 720, placas de circulación 91-31-XCZ del estado, al circular procedente de Cuitláhuac con rumbo a Córdoba, al llegar a la altura del kilómetro 18+400 en la comunidad de Palmillas, perdió el control debido al exceso de velocidad con que se desplazaba aunado a que el asfalto mojado le impidió que frenara a tiempo ocasionando que se saliera de la carretera hasta caer a una cuneta en la cual por la creciente del agua que se acumuló quedó atorado.
Automovilistas que circulaban sobre dicha carretera, así como trabajadores de una gasolinera cercana al percatarse del accidente corrieron hasta el lugar en donde quedó el taxi para brindar ayuda al tiempo de solicitar a través del número de emergencias 066 la presencia de los cuerpos de auxilio.
En cuestión de minutos arribaron elementos de la Policía Municipal así como personal de Auxilio Vial quienes se dirigieron hasta el taxi con la finalidad de auxiliar al conductor, sin embargo al examinar el cuerpo se dieron cuenta de que estaba sin vida, limitándose en dar parte a las autoridades ministeriales.
Minutos después llegaron al lugar del accidente elementos de la Policía Ministerial quienes recabaron la información correspondiente, tanto peritos en criminalística de los Servicios Periciales de la PGJ efectuaron las diligencias de ley, al tiempo de que apoyados por el personal de una funeraria realizaron las maniobras para sacar el cuerpo del interior del vehículo el cuerpo del taxista y así colocarlo en una carroza fúnebre, para después ser trasladado al anfiteatro local de una funeraria donde le sería practicada la autopsia de ley por parte del médico forense de la Procuraduría General de Justicia Luis Santopietro Arceo y con ello determinar las causas de su muerte.
Gerardo Luna/ Carlos Orvi
El Buen Tono