Pretoria.- La acusación, que sostiene que Oscar Pistorius mató de manera intencionada a su novia Reeva Steenkamp, tratará de probar el supuesto carácter violento de Pistorius para conseguir que sea condenado por “asesinato premeditado”, un cargo que le costaría la cadena perpetua.
Mientras tanto, el deportista asegura que disparó a Steenkamp, modelo de profesión y que entonces tenía 29 años, al pensar que lo hacía contra un intruso.
Tanto el fiscal como la defensa aceptan que Pistorius mató a Steenkamp de varios disparos a través de la puerta cerrada del baño de la casa del atleta de Pretoria.
La primer testigo en el juicio a Oscar Pistorius declaró ayer haber escuchado gritos “espeluznantes” de una mujer antes del sonido de cuatro disparos la noche en que el atleta mató a su novia.
Michell Burger, una mujer que vive en la propiedad vecina a donde vivía Pistorius, dijo que ella y su marido despertaron al escuchar los gritos horas antes del amanecer del 14 de febrero del año pasado.
Los fiscales creen que el atleta de fama mundial le disparó a su novia después de una pelea y que de inmediato trató de montar una farsa para ocultar que tuvo una discusión fuerte antes de los disparos mortales.
Burger añadió: “Ella gritaba terriblemente y pedía ayuda a gritos”. Declaró que ella también escuchó a un hombre gritar en busca de ayuda antes de los disparos.
El abogado de Pistorius, Barry Roux, abrió su interrogatorio preguntando a Burger si creía que Pistorius era un mentiroso. Ella no contestó directamente con un sí o un no, sino que repitió lo que recordaba de los acontecimientos de esa noche.
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