De la Redacción
el buen tono
Córdoba.- El regidor Eduardo Mondragón se deslindó de todas las acusaciones que un grupo de manifestantes ha hecho en su contra, especialmente desconoce vínculos con Patricia Ramírez.
Y es que ayer nuevamente vecinos de la colonia Los Carrizos se manifestaron en el Palacio Municipal para solicitar a las autoridades ser escuchados, esto luego de que arremetieran contra miembros Cardenistas, a quienes acusan de haber lucrado con su colonia durante aproximadamente cinco años.
“Queremos regularizarnos, nosotros no pertenecemos al partido Cardenista y cuando se formó el comité para ver los avances que
tiene la colonia nos dimos cuenta que no había nada”, señaló un manifestante.
Inmediatamente después de la manifestación comenzó a circular un texto anónimo donde acusaban al regidor de movilizar a un grupo de Cardenistas con promesas falsas, todo para desestabilizar la administración municipal actual, bajo el cobijo de ex autoridades municipales, menciona.
Tras varios días de “supuestas” manifestaciones en su contra, el regidor noveno ahora pretende responsabilizar al Alcalde Juan Martínez Flores y a la Síndica Única, Vania López, de los problemas generados por él en algunas colonias, señala el escrito.
Apunta el texto que los colonos gestionaron a través del regidor solicitudes en materia de regularización de predios, lo cual presuntamente no fue notificado a las áreas correspondientes del Ayuntamiento, originando los problemas al interior de la administración local.
Pero el funcionario negó las acusaciones, «lo único que hago es trabajar para la colonia, misma que legalmente está conformada por un comité de seis personas que son quienes han gestionado todo, solo un 5% es cardenista».
Se deslindó de la supuesta lideresa Patricia Ramírez, a quien señalan como «su cómplice» y es tachada por los mismos colonos de ser una «corrupta», según dice el escrito.
De la misma manera, el regidor asegura que ha recibido amenazas y teme por su seguridad y la de su familia, por lo que no descarta proceder legalmente, pero está en espera de que se dé un diálogo primero y resolverlo.