
Alejandro Aguilar
El Buen Tono
córdoba.- En medio de un clima de especulación global por la próxima elección papal, el obispo de Córdoba, Eduardo Porfirio Carmona Ortega, hizo un llamado contundente a la feligresía: ignorar las profecías catastrofistas sobre el “fin del mundo” y concentrarse en la oración por el Papa fallecido y su sucesor.
En El Vaticano, los 113 cardenales presentes en Roma celebraron este jueves por la mañana su tercera Congregación General y anunciaron quiénes pronunciarán las dos meditaciones previas al Cónclave.
Aunque el obispo Eduardo Carmona evitó mencionar nombres, su alusión a “rezar por el que vendrá” coincide con rumores que ganan fuerza: la posible elección de un cardenal africano, como el ghanés Peter Turkson o el congoleño Fridolin Ambongo, lo que marcaría un punto de inflexión para una institución con 1.300 millones de fieles, el 40 % en África y América Latina, y es que por primera vez, los cardenales electores de países no occidentales superan el 50 %, reflejando un cambio demográfico irreversible.
Carmona Ortega criticó la “obsesión por descifrar lo indescifrable”, en referencia a teorías que circulan en redes sociales y sectores tradicionalistas, las cuales asocian la elección del próximo pontífice con presagios bíblicos sobre el fin de los tiempos. “Lo esencial es rezar por el eterno descanso del Papa y por quien lo sucederá, no perdernos en conjeturas”, insistió, subrayando que la fe debe prevalecer sobre el miedo.
Mientras El Vaticano moderniza sus protocolos, incluyendo la presencia de observadores laicos en las congregaciones, sectores conservadores insisten en que el próximo Papa debe “combatir la secularización” y reafirmar dogmas. Frente a esto, Carmona Ortega optó por un equilibrio: recordó la importancia de la “unidad en la oración” sin alimentar polarizaciones. “La Iglesia no es una empresa de pronósticos”, ironizó, en un claro mensaje a quienes especulan incluso sobre las “señales” en la salud de los pontífices.
