Xalapa.- Durante una década, Hernán Martínez Zavaleta y/o Jorge Martínez López, El Comandante H, jefe de plaza de una célula de Los Zetas en el Sur de esta Entidad y en el Norte de Tabasco, cultivó amistades poderosas en el PRI, en el PAN y entre la clase empresarial.
Su captura, ocurrida la tarde-noche del viernes 30 de junio en el municipio tabasqueño de Cárdenas, vino a poner a la luz pública su relación con un círculo de poder en el Sur de Veracruz.
Dueño del lujoso restaurante The Port House, de gimnasios y bares, El Comandante H siempre aparecía fotografiado cerca del empresario priista José Antonio Chagra Nacif y de la secretaria de Mujeres del Comité Municipal del PVEM, Genoveva Beba Chagra.
Pero en Acción Nacional (PAN) también trabó amistad con el empresario y excandidato del PAN-PRD a la alcaldía de Coatzacoalcos, Jesús Moreno.
Apenas ayer, en redes sociales, filtraron que el Comité Directivo Municipal de Cosoleacaque también “convidaba” como invitado especial a Martínez Zavaleta a las reuniones con el senador Fernando Yunes –hijo del actual Gobernador de Veracruz–, en mítines proselitistas en el Sur de la entidad.
En un escueto comunicado, Yunes Márquez aceptó que en esa reunión se encontraba El Comandante H, pero se deslindó de haber convocado al hoy indiciado y de organizar dicha reunión, cargando la responsabilidad en los panistas del Sur de la Entidad.
En el caso del PRI, parientes de los Chagra amenazaron vía telefónica a la periodista de La Jornada Veracruz, Sayda Chynas, por revelar la amistad de dicha familia con Martínez Zavaleta.
En el caso del líder estatal del PAN, José de Jesús Mancha, justificó el que los panistas Jesús Moreno y Fernando Yunes se fotografiaran con delincuentes porque: “Cuando andan en campaña, se toman fotos con quien sea, por quedar bien”.
Aunque Hernán Martínez llevaba una década operando en la zona y fortaleciendo sus relaciones con políticos y empresarios del Sur de Veracruz, fueron las investigaciones ministeriales federales y las locales llevadas desde Xalapa las que lo relacionaron como el autor intelectual de la salvaje muerte de seis personas el 17 de junio pasado, en el puerto de Coatzacoalcos, cuatro menores entre ellos.
Las ejecuciones, revelaron policías ministeriales, fueron en venganza porque una de las seis personas asesinadas participó un mes atrás en la ejecución de uno de sus principales colaboradores, Bernardo Mota, por lo que no se quedó cruzado de brazos ante los hechos.
