Nuevo León.- La tensión política entre el gobernador Samuel García y el PRIAN ha resultado en el impago de al menos 7,000 empleados de organismos autónomos en Nuevo León. Esta situación afecta a diversos sectores, incluyendo a 3,600 empleados de la Fiscalía General del Estado, 2,500 del Poder Judicial, 400 del Congreso local, así como personal de la Comisión de Transparencia y Acceso a la Información, la Auditoría Superior del Estado y la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
La falta de pago, que incluiría salarios y el bono del servidor público, se presenta en un momento crítico coincidiendo con la intensificación de la lucha política entre García y el PRIAN. Hasta el momento, no se ha revelado la cantidad total de dinero no depositado por la Tesorería del Estado. Este episodio añade presión al ya tenso ambiente político en el estado, destacando la vulnerabilidad de los empleados de organismos autónomos en medio de disputas políticas.
Según informantes, el impago se atribuye a una presunta instrucción del gobernador Samuel García, exacerbando las tensiones con el Congreso y los miembros del PRIAN. Esta situación genera preocupación sobre las consecuencias para los empleados afectados y plantea interrogantes sobre la ética y legalidad de retener los salarios como medio de presión política.